Qué se dice

Qué se dice

Ojalá se cumpla

Un buen gesto; sobre todas las cosas. No se confía mucho en que los miembros de las base que obran tras los principales candidatos de la contienda de mayo modifiquen su comportamiento apasionado y mucho menos que se reduzca el porte de armas con proclividad a la agresión. Lo práctico es que los manifestantes callejeros se eviten; que haya coordinación entre los dirigentes del activismo para que las marchas y “bandereos” de blancos y morados nunca se encuentren. Por lo demás, la acción propagandística orientada a descalificar al adversario –no tanto a exponer planes para resolver problemas- no va a ser cambiada a esta altura del juego. Así que los candidatos de los principales partidos han hecho bien en complacer a monseñor Agripino Núñez Collado rubricando un acuerdo de paz pero no podemos asegurar que existen garantías de que que su ejemplo va a apaciguar los ánimos contundentemente. De todos modos, la campaña presente no puede ser calificada todavía como más violenta que las anteriores. Crucemos los dedos.

Feria del Libro

Mucho conviene que a pocas semanas de las elecciones presidenciales la atención del país sea atraída por otra gran cita. Una que nada tiene que ver con ambiciones políticas sino con el desarrollo intelectual. De nuevo, como en cada abril, los estudiantes y los ciudadanos en sentido general tendrán oportunidad de asistir al encuentro con los libros. En el espléndido parque que uno vez alojaba al zoológico estarán expuestas miles de obras impresas y se cumplirá un amplio programa de actividades culturales de trascendencia internacional. En medio de la dureza del proselitismo de una campaña hueca y fundada en promesas y denuestos, el país abre una tregua para la razón y la inteligencia. Nuestra juventud, que ha estado bombardeada por los cantos de sirena de los proyectos partidarios, encontrará en la Feria del Libro un oasis para escapar de la demagogia y el populismo. Respaldamos plenamente a los organizadores de la importante jornada en su decisión de impedir cualquier intento de mezclar la feria con consignas electoreras. En la literatura cabe todo lo que corresponda al campo de las ideas y las expresiones culturales y artísticas. Pero el sectarismo de la política debe estar fuera de la feria del libro.

Perspectiva

El Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) devino en fuerza electoral intermedia, con vocación de equidistancia y capacidad para inclinar la balanza, cuando todavía el doctor Joaquín Balaguer vivía. Eu la etapa final de su carrera política, hacia 1996, el caudillo del Gallo estuvo al frente de un sector político numéricamente menor pero fiel a su voluntad. De ahí que decidiera el triunfo del Partido de la Liberación Dominicana con el doctor Leonel Fernández como candidato de entonces. Sin embargo, en el presente, el Reformismo no se proyecta hacia el futuro como una masa uniforme, mientras tiende irremisiblemente a ocupar una tercera posición en la simpatía del electorado, de acuerdo con todas las encuestas. No se advierte que, en su momento, el ingeniero Eduardo Estrella pueda administrar con cohesión la simpatía de sus adherentes para que, pasada la primera vuelta, le obedezcan inclinándose hacia alguno de los aspirantes que saldrían con vida de la consulta del 16 de mayo. A diferencia de lo que ocurría contra Peña Gómez, el PRSC es ahora un partido disperso, con una parte de sus componentes tradicionales definidos desde ya por el PLD y otros respaldando a Eduardo… y un sector que prefiere estar lejos de ambos polos.

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