Sitiados por la basura.-  El alcalde del Distrito Nacional Roberto Salcedo, invitado  de esta semana al Almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio,  fue todo lo diplomático que le permitieron las circunstancias cuando le tocó referirse a la forma en que el alcalde del ayuntamiento  de Santo Domingo Norte, Francisco Fernández, asumió la administración del vertedero de Duquesa, a lo que atribuye el gran cúmulo de basura en las calles del Gran Santo Domingo, y aún así no pudo ocultar su inconformidad con una decisión que calificó de inconsulta y unilateral.  Más explícito y claro fue al expresar su frustración con la Mancomunidad de ayuntamientos que componen el Gran Santo Domingo, que por cierto encabeza al alcalde de Santo Domingo Norte, que en esta situación ha demostrado su total inoperancia. ¿Cómo es posible que los alcaldes de esos cuatro ayuntamientos no sean capaces ni siquiera de reunirse para tratar de buscar solución a un problema que impacta directamente sobre la salud de sus munícipes y daña la imagen del país?  Y para que no haya dudas de la amenaza que representa, en el presente y en el futuro, la basura que nos rodea por todas partes, Salcedo  dejó en al aire  una dramática advertencia: si el Gobierno no mete su mano salvadora  para construir un nuevo relleno sanitario, a más tardar dentro de doce años habrá concluido  la vida útil de Duquesa y no habrá  donde botar la basura, que en el caso del confinado Distrito Nacional significa que tendremos que comérnosla o tirarla al mar.