Prejuicios.- Según el doctor Marino Vinicio –Vincho– Castillo, asesor en materia de drogas del Presidente de la República, en el 70% de los casos de narcotráfico hay colombianos involucrados. Sin embargo, un vistazo a las estadísticas de la Dirección Nacional de Prisiones sugiere una realidad muy distinta, a menos que los colombianos sean los que se benefician del mayor porcentaje de descargos de la justicia dominicana. Un total –según esas estadísticas– de 1,192 reclusos extranjeros guardan prisión en nuestras cárceles, entre ellos 789 haitianos, que representan amplia mayoría, 103 holandeses, casi todos por narcotráfico, 47 españoles, 29 colombianos, 27 franceses, 26 venezolanos, 16 italianos, 10 alemanes, 10 británicos, 10 curazoleños, 6 de Jamaica, 4 africanos, 3 ecuatorianos, 3 cubanos, 2 panameños, un griego, un guatemalteco y dos argentinos. Lo que esas estadísticas indican, más allá de los probables prejuicios del doctor Castillo, es que nada es lo que a simple vista parece. Y, sobre todo, que los colombianos, por lo menos en materia de narcotráfico, no son los únicos malos de la película.
Sicario por un día.- El pasado miércoles la Policía Nacional informó del apresamiento en Santiago de un presunto sicario responsable de la muerte nada mas y nada menos que de diez personas, un hombre de 27 años que habría confesado que lleva cinco años ejerciendo el innoble oficio de asesino a sueldo, y hasta citó al joven Kelvin Ceballos, de 17 años, muerto a balazos en una barbería del sector de Bella Vista de esa ciudad, como su víctima más reciente. Pero ocurre que 24 horas después ese mismo individuo fue puesto en libertad, por alegada falta de pruebas. ¿Qué habrá pasado ahí?