Clientelismo en la UASD-. Vuelve la Universidad Autónoma de Santo Domingo (Uasd) a los primeros planos, pero lamentablemente, y como ocurre cada vez con más frecuencia, solo gracias a las malas noticias. Su flamante rector, Iván Grullón, ha revelado que en la universidad del Estado, que se financia –siempre es pertinente recordarlo– con recursos que aportamos los contribuyentes a través de los impuestos que pagamos, hay un excedente en la nómina que supera los 2,000 empleados, 884 de los cuales fueron nombrados en los últimos cuatro meses. Grullón explicó, durante el acto de presentación de sus nuevas autoridades, que debido a esa situación las finanzas de la academia se encuentran en estado de emergencia, y todo gracias a “la alegre y nada responsable ejecución presupuestaria en la gestión del saliente rector Mateo Aquino Febrillet”. Ya antes, en plena campaña por la rectoría y demás autoridades académicas, el entonces candidato acusó al profesor Aquino Febrillet de inflar la nómina con propósitos clientelistas, acusaciones que ha vuelto a reiterar y que merecen una explicación amplia, convincente y satisfactoria de parte del exrector, quien tiene ahora la palabra.

Un lugar común.– Siempre ha sido un socorrido lugar común, en nuestra cultura política, la afirmación de que el PRD, no obstante sus significativos aportes a la construcción de la democracia dominicana, carece de una auténtica vocación de poder. Y sea que tenga o no justificación una afirmación tan categórica, lo cierto es que el errático comportamiento de sus líderes y dirigentes a lo largo de su accidentada historia no solo ha servido para reforzar ese convencimiento sino que llevó a muchos a proclamar, como si se tratara de una verdad sabida y digerida a la que solo cabía resignarse, que el partido del jacho prendío solo servía para hacer oposición. Ahora ni siquiera para eso.