Metaleras sin ley.– El director de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo, (CAASD), el ingeniero Alejandro Montás, está al grito, y con razón. Y es que nada ilustra mejor el desorden en que vivimos, el progresivo deterioro del principio de autoridad, que su denuncia de que los ladrones de metales han convertido los medidores de agua en su principal objetivo, a tal punto que entre el jueves santo y el pasado domingo cargaron con 96, para un total de 308 unidades en el mes de abril. Según las explicaciones ofrecidas por el funcionario, los ladrones han concentrado sus operaciones en el municipio de Santo Domingo Este, aprovechándose, probablemente, de la escasa o nula vigilancia policial en la zona, con lo que ocasionan un grave perjuicio económico a la CAASD, que compra esos medidores a RD$4,500 cada uno, mientras ellos los venden a los metaleros a tan solo 65 pesos. Si este fuera un país de verdad, donde las instituciones funcionaran y la autoridad se hiciera respetar, sería relativamente fácil evitar esos robos o, en su defecto, perseguir a los responsables, que solo pueden vender esos medidores en un solo sitio. Pero ya se sabe, como nos acaba de confirmar, una vez mas, el ingeniero Alejandro Montás, que eso es pedir demasiado, pues las metaleras se han convertido en un lucrativo negocio que nadie parece estar en capacidad de fiscalizar ni regular. ¿Cuál será el secreto?

Elemental.– Si el asesinato de Adalgisa Vanesa González González, a quien desconocidos dispararon desde una yipeta en marcha la madrugada del pasado sábado, se produjo por error, como asegura el jefe de la Policía Nacional, el mayor general Manuel Castro Castillo, quiere decir entonces que ya la institución sabe quien era el verdadero objetivo y, por lo tanto, quien es el responsable de su muerte. Como decía el célebre Sherlock Holmes: Elemental, mi querido Watson.