Un árbitro sordo y ciego.- El Comité Político podrá seguir haciéndose el sordo a las voces que dentro del propio PLD le reclaman su intervención, en calidad de árbitro, en la sorda pugna que libran leonelistas y danilistas por las candidaturas del 2016, incluida –por supuesto–la Presidencia de la República, pero ya no podrá alegar ignorancia. No después de la publicitada denuncia, crisis de llanto incluída, de la senadora de la provincia de Dajabón Sonia Mateo ante la Procuraduría General de la República, en la que acusó a su compañero de partido Olgo Fernández, director del INDRHI, de orquestar un “plan criminal” para asesinarla. ¿Qué razones, se preguntará usted, podría tener para una acción tan extrema y dramática como planificar la muerte de una Senadora de la República? Si todavía no lo han adivinado, no tengo más remedio que informárselo: la candidatura a la senaduría por Dajabón, a la que supuestamente también aspira Fernández. Desde el Comité Político se podría alegar, si el propósito es seguir escurriendo el bulto, que el asunto está en manos del organismo competente, que ya designó a un Procurador Adjunto para que investigue la denuncia de la legisladora, pero sería un gran error, que más temprano que tarde tendrá consecuencias, ignorar el componente político de este escarceo, pues ambos son importantes funcionarios del Gobierno pero también dirigentes peledeístas de peso e influencia en esa zona de la frontera. ¿O acaso sus miembros no ven el daño que le hace al PLD y al Gobierno, políticamente hablando, que se esté hablando de asesinato y tramas criminales para dirimir la disputa por un cargo electivo entre dos compañeros de partido? Después de la muerte de un regidor peledeísta a manos de sicarios contratados por el alcalde de Bayaguana, de su mismo partido, sería un acto de indolencia criminal que el Comité Político ignore una denuncia tan grave como la que ha hecho la senadora de Dajabón.