Desde mi asombro, y sin ser experto inmobiliario, solo puedo decir que debe ser uno de los contratos de alquiler mas rentables que se haya firmado alguna vez en este parejero país, pero eso debe confirmarlo el propietario del edificio alquilado por la Empresa Distribuidora de Electricidad del Sur (Edesur) por US$300 mil al mes, cerca de 15 millones de pesos, chelitos mas chelitos menos, dependiendo de la cotización de la moneda norteamericana al momento de hacer el pago. La noticia de que la distribuidora paga esa astronómica suma por concepto de alquiler anda dando vueltas desde hace varios días, pero nadie le prestó atención ni credibilidad hasta que el diputado peledeísta José Laluz denunció en el Congreso el contrato, firmado en el año 2,000 en el gobierno de Hipólito Mejía, lo que ayer fue confirmado por su administrador, el licenciado Radhamés del Carmen Maríñez. El funcionario explicó en un programa radial que ese contrato fue renovado tres veces en los años 2005, 2010 y 2015, durante los gobiernos de Leonel Fernández y Danilo Medina, que vence en el primer trimestre del 2020 y que hasta que no llegue esa fecha no hay nada que hacer, pero también reveló que el costo del alquiler se estableció calculando el valor del metro cuadrado de construcción en Naco, que en estos momentos anda por los 1,999 dólares. Gracias a sus explicaciones recordamos que Edesur opera con déficit presupuestario y en base a subsidios (no mencionó la nómina supernumeraria), pero aseguró que se propone ir desmontando esos gastos de alquiler para convertirlos en inversiones. No dijo, sin embargo, qué hará para conseguir que se produzca ese milagro financiero, ni tampoco respondió la pregunta que todos nos estamos haciendo desde que se confirmó que Edesur paga 300 mil dólares mensuales, sacados de los bolsillos de los contribuyentes, por el alquiler del edificio que aloja su sede principal: ¿Quién es el afortunado propietario?