Liderazgos sin relevos.- Algunos han criticado el hecho de que la veterana dirigente  María Teresa  Cabrera aspire a volver a dirigir la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), como queriendo decir, esos críticos,  que el relevo del liderazgo entre los maestros prácticamente no existe.

La situación, que debería ser fuente de preocupación para los maestros, no se da únicamente en la ADP sino en otros gremios y sindicatos, donde hace muchos, muchos años, estamos viendo las mismas caras de siempre,  solo que cada vez mas ajadas y envejecidas, y tal vez eso explique en parte el ostensible  el fracaso, que ya puede calificarse de histórico, del sindicalismo en la República Dominicana. 

De todas maneras creo que en el caso de la Asociación Dominicana de Profesores  los maestros saldrían ganando con la elección de María Teresa,  una de las más activas  militantes de la lucha por el  4% del PIB para la educación, pues su actual presidente, el diputado del PLD  Radhamés Camacho, hace tiempo que se convirtió en un burgués hecho y derecho, con ingresos mensuales que no ganaría en un año un maestrico de escuela, por lo que de ninguna manera puede considerársele un legítimo representante de sus intereses y aspiraciones.

Bancas de apuestas.- Hay cifras que lo dicen todo. Por ejemplo, las once mil bancas de apuestas ilegales que, según el administrador  de la Lotería Nacional, existen en el país, a las que habría que sumar las 28,483 oficialmente registradas en la Dirección General de Impuestos Internos (DGII). ¿Cómo llegamos hasta esos extremos? La respuesta es simple: gracias a una permisividad total unida a una absoluta falta de control de parte de las autoridades “competentes”,  preocupadas tan solo por  los impuestos que paguen o dejen de pagar todas  esas bancas sin parar mientes en que son el peor enemigo de los pobres de este país, tan numerosos como desamparados.