Qué  se dice

Qué  se dice

A lo que nada nos cuesta….- Cada vez se convence uno más de que los políticos enquistados en las instituciones públicas, sobre todo en las autónomas y descentralizadas, manejan a su antojo, y sin ningún respeto por la racionalidad y la prudencia, los dineros públicos, como si se tratara de una gran fiesta en la que se han reservado el derecho de admisión.

 Y como en las fiestas navideñas (pascueras, las llama el pueblo, con la malicia agazapada tras  el doble sentido) es que más se goza, representa  una magnífica oportunidad de arrojar por la ventana (ojo: que utilice esa metáfora no quiere decir que ignore que en algún bolsillo cayeron esos chelitos) el dinero que nada nos cuesta, como nos muestra un reportaje publicado esta semana por  acento.com.do en el que se revela que el organismo electoral gastó en diciembre del 2011 más de 53 millones de pesos en canastas navideñas que repartió a empleados, funcionarios y allegados. Por eso hay que tomar como un chiste de mal gusto, y definitivamente inoportuno, la advertencia que acaba de hacer el  presidente de la JCE, el doctor Roberto Rosario Márquez, de que se verá obligado a suprimir parte de los servicios que ofrece la institución tanto aquí como en el exterior si el gobierno central no le asigna los RD$4,549 millones que ha solicitado como presupuesto para el 2013. 

 Una especie extinguida.- ¿Un coronel que se case con la gloria? Esos ya se extinguieron, Don Alvaro. Ahora lo que hay son  coroneles que consideran que su rango los coloca por encima de  la justicia y la ley, que patrocinan  bandas de sicarios, que ofrecen protección a narcotraficantes a cambio, desde luego, de una buena tajada, que cobran peaje a delincuentes y dueños de puntos de drogas,  y hasta que dirigen redes de tráfico y trata de personas. Por supuesto, nada hay de glorioso en esas actividades, pero sí dinero, mucho dinero, y eso es lo que les importa.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas