Qué se dice

Qué se dice

¿Por qué?.-   Wilton Álvarez Delgadillo, de 33 años, murió  de siete balazos que recibió de cuatro policías cuando se encontraba durmiendo en su residencia del sector El  Valiente, en Santo Domingo Este, donde los agentes irrumpieron sin una orden judicial a las 7:00 de la mañana y empezaron a disparar sin mediar palabras ni ofrecer explicaciones. La crónica del Listín Diario cuenta que el jefe de la Policía, el mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, reaccionó molesto cuando se enteró de la noticia, advirtiendo de inmediato que no tolerará abusos ni crímenes contra la ciudadanía, y adelantó que los agentes serán sancionados y sometidos a la justicia en caso de que se demuestre (¿?) que cometieron un homicidio sin  justificación. Es evidente que  las circunstancias que rodearon el hecho impidieron  que se invocara el  desacreditado  expediente del intercambio de disparos,   que entre enero y agosto de este  año se ha cobrado la vida de 400 ciudadanos etiquetados previamente como presuntos delincuentes, según consta en el más reciente informe de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos que preside el doctor Manue María Mercedes, quien ha dicho que someterá a la justicia al jefe policial. ¿Ocurrirá  lo mismo  que con  la gente del Foro Social Alternativo, que ha anunciado varias veces que someterá a la justicia a Guzmán Fermín y todavía no ha llevado a la Fiscalía el primer papelito? Hay que entender que en un país como este, con una tradición autoritaria tan arraigada, eso es más fácil anunciarlo  que hacerlo, pero se atreva o no alguien  a ponerle el cascabel a un gato tan fiero es innegable que urge  detener la orgía de sangre desatada en nombre de la ley y el orden como ocurre en las dictaduras. Dicen que lo mucho hasta Dios lo ve, ¿por qué usted no, señor Presidente?

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