Qué se dice

Qué se dice

De fuera vendrán.- ¿Cuántos reos condenados por tráfico de niños haitianos están cumpliendo condenas en nuestras cárceles? ¿Cuántos imputados están siendo procesados en nuestros tribunales de justicia por ese delito? Si las autoridades dominicanas, las mismas que le salieron al frente, más rápido que inmediatamente, a la advertencia de un funcionario del departamento de Estado de que el país podría ser sancionado por su falta de compromiso contra el tráfico de niños haitianos pudieran mostrar a las autoridades norteamericanas una relación pormenorizada, con nombres y apellidos,  de las personas sometidas a la justicia y condenadas por tráfico de niños haitianos le darían la mejor de las respuestas al arrogante imperio y su amenaza de imponernos sanciones, que irían desde la suspensión de la ayuda militar y económica hasta el bloqueo de algunas exportaciones, si no hacemos algo para cambiar esa situación antes de junio próximo. Desgraciadamente, no es posible dar esa clase de respuesta, simple y sencillamente porque   aquí se hace muy poco por enfrentar ese infame negocio, o si se hace no se producen las sanciones correspondientes, que para el caso es   lo mismo. ¿Cuántas veces se ha denunciado, por este y otros medios, que los niños haitianos  que piden limosnas en las principales avenidas de Santo Domingo son llevados allí, y posteriormente recogidos, por adultos que los utilizan para explotarlos? ¿No sería relativamente fácil  para Migración,  la Policía o los organismos de seguridad establecer una vigilancia en esas avenidas para atrapar con las manos en la masa a los explotadores? Argumentar que la advertencia del  Departamento de Estado es parte de una campaña de descrédito contra el país es la forma mas fácil de nuestros funcionarios salirse por la tangente, pero tambien de evadir la responsabilidad de poner coto a una situación que  nos llena de oprobio y vergüenza.

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