¡BILIOTECA! GANÓ LA UASD
A decir verdad, las bibliotecas no nacen sabiendo. Deben ser edificadas antes de que llegue, gradual o masivamente, lo que será su contenido de  obras literarias  y de  conocimientos. Así ocurrió con dos importantes edificios construídos por Balaguer en diferentes etapas de sus administraciones; primero levantó la Biblioteca Nacional y luego la República Dominicana.

Desde luego que han llegado a ser verdaderos centros de lectura con el paso del tiempo y con la progresiva colocación de volúmenes en sus tramos. En cualquier sociedad, edificarles grandes espacios a los libros es un hecho muy positivo. La creación de bibliotecas es siempre un triunfo para la inteligencia. Y si las autoridades de la Universidad Autnónoma y el Estado Dominicano, a través de dos gobiernos sucesivos, hicieron lo que procedía para que ahora exista una amplia y majestuosa sede en el que cabrá un gran volumen de impresos,  eso debe ser motivo de júbilo; no de mezquinas reaciones de violencia y de cuestionamientos superficiales; de tonta disputa sobe si la obra se demoró o no  o sobre quién merece más lauros. ¡Oh gran biblioteca de la UASD. Los que sabemos valorar los libros te saludamos de pie, con solemnidad y satisafacción!

IMAGEN  FINAL

Antes de abandonar el Palacio Nacional, y cerrar su mandato, el Presidente Hipólito Mejía  debería hacer mucho  más que distribuir álbumes con la colección de sus obras de cuatro años. No negamos que se trataría de un balance de realizaciones digno de ser colocado en archivos como testimonio de la gestión 2000-2004, pendiente de juicio pleno. Pero agua pasada no mueve molinos  a los fines de las prioridades del presente. Ni las fotos ni los textos de lo que se hizo va a aliviar a la gente de este tramo final de tinieblas y de vergozosas crisis hospitalarias; ni de irritantes escaseces, ni de las preocupaciones que provocan proyectos, leyes y decretos cuestionados por  los efectos que tendrían sobre el medio ambiente  y las finanzas públicas que heredará el próximo gobierno (reducción de áreas protegidas, concesiones masivas de   exoneraciones y pensiones, etc). Quedan pocos días para que el cuadrienio llegue a su término  pero este gobierno debería preocuparse por   la impresión que va a dejar en los gobernados; y esa impresión no debería ser la de que   careció de sensibilidad ni  de que se mostró insuficientemente preocupado ante el caos de los apaones y los desabastecimentos. Esa penosa  sensación  de que la ciudadanía no le ha dolido.

“LAVADO” DE CELULARES

Esta visto: de buenas a primeras, las autoridades y las compañías telefónicas bajaron la guardia o ya no tienen medios técnicos para establecer si un celular es robado o no lo que está permitiendo que los ladrones activen  rápidamente cualquiera aparato de estos. Automáticamente ha resurgido el hurto, a troche y moche. En estos momentos alcanza plenitud de eficacia el mecanismo que los ladrones de celulares ponen en uso para “limpiar” de manchas la mercancía que arrebatan en las calles. Existe al ciento por ciento una industria de lavado de estos botines de robo,  pues las compañías telefónicas no están poniendo inconvenientes a su procedencia y se dice que es porque nuevas tecnologías en poder de los delincuentes son usadas para eludir los controles sobre el origen de los equipos móviles que se mueven en un mercado informal que ya va cobrando envergadura. Durante un buen tiempo les fue imposible a los ladrones  desvincular los celulares de los registros que correspondían a sus antiguos dueños. Ya eso se acabó. La ola de robos de celulares no tiene madre,como consecuencia.