Qué Se Dice: El incontrolable (II)

Qué Se Dice: El incontrolable (II)

La no comparecencia del diputado reformista Pedro Botello ante el Consejo Disciplinario de la Cámara Baja, que lo investiga por su participación en los violentos disturbios frente al Congreso Nacional en reclamo de la aprobación del proyecto que permitiría que los trabajadores retiren el 30% de lo ahorrado en las AFP, coloca en una situación incómoda a sus miembros, y ojalá no signifique lo que muchos ciudadanos sospechan; que el representante de La Romana considera que su condición de legislador, pero sobre todo la causa que enarbola como enloquecido cruzado de los sufridos trabajadores dominicanos, lo colocan por encima del bien y del mal o de cualquier ley o reglamento que ponga límites a sus excesos. Tal vez por eso los descalificó en su cuenta de twiter.

“Quienes se frotan las manos por una sanción, solo disponen de un mamotreto injustificado y carente de formulación precisa, sin ilícito disciplinario. La lucha del 30% AFP solo termina con el desembolso, tal vez lo único que reciban los trabajadores en 30 años de trabajo”.

O sea que el acusado, según el particular criterio de Botello, es quien determina si la acusación en su contra tiene o no fundamento jurídico, y por lo tanto es quien decide si le hace caso y se pone a disposición de la investigación del Consejo Disciplinario o si continúa con su absurda cruzada sin hacerle caso a nadie, convencido de que no pasará absolutamente nada.

Por suerte solo hay un Pedro Botello en la Cámara de Diputados, que por no tener capacidad de someterlo a la obediencia tendrá que resignarse a convivir con un comportamiento que degrada y deshonra su condición de legisladores. Pero como en este país los malos ejemplos cunden como la verdolaga, sobre todo si se salen siempre con la suya, debemos estar preparados para la aparición de imitadores, y no solo en el Congreso Nacional, dispuestos a superar sus hazañas.

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