Dicen por ahí que no hay peor cuña que la del mismo palo, lo que acaba de confirmar, una vez mas, el ex administrador de Bienes Nacionales, el licenciado Víctor Tio, para quien el gobierno encabezado por Hipólito Mejía ha sido el más corrupto que ha tenido el país desde la fundación de la república.

Tio, sometido a la justicia por la alegada venta irregular de terrenos del Estado, parecería exagerar un poco al hablar de las dimensiones que adquirió la corrupción durante el pasado gobierno, pero no faltará quien comparta su afirmación, sobre todo entre aquellos convencidos de que el ex funcionario, miembro del equipo gobernante hasta su caída en desgracia y perredeísta de prácticamente toda la vida, habla con absoluto conocimiento de causa. Indirectas Doña Alejandrina Germán asegura poseer un pormenorizado inventario de cada escuela que necesita de algún tipo de reparación o rehabilitación en su estructura, de las que conserva cintas de video y fotografías, por lo que no necesita recorrer de punta a punta el país para saber en qué condiciones se encuentran esas escuelas.

La afirmación de doña Alejandrina podría interpretarse sin mucho esfuerzo como un reproche indirecto a este periódico, que esta semana ha publicado varios reportajes sobre el estado de algunas escuelas y liceos en la zona fronteriza, pero no hay que tomárselo demasiado en cuenta, pues la secretaria de Educación no está obligada, necesariamente, a comprender el rol de la prensa independiente en las sociedades democráticas. Mientras tanto, gracias a esas publicaciones, sobre todo a las fotografías, los niños que asisten a la escuela rural Potroso, en Elías Piña, tendrán la oportunidad de estudiar en una escuela como Dios manda, ya que una empresa agroindustrial que opera en la zona se encargará de construirla y dotarla de todo lo necesario, y hay personas residentes en Estados Unidos que han ofrecido su ayuda para construir el liceo de Los Jobillos, en Las Matas de Farfán. Esa es nuestra contribución, le guste o no las autoridades, al mejoramiento de la educación pública en República Dominicana.

Malas noticias

«Policía mata en Azua a un integrante de la banda de Vla / Matan sobrina de Beauchamps Javier/ Matan uno y arrestan dos por secuestro en Bonao». Y en la página de enfrente: «Inseguridad reduce la vida social en Santiago/ Senado reclama justicia ante crimen». Las páginas de los periódicos están repletas, hasta el vértigo, de ese verbo atroz, conjugado en todas las formas posibles; matar. Pero también están llenas, esas páginas, de reclamos a las autoridades, desde el cardenal López Rodríguez hasta el Procurador Francisco Domínguez Brito, exigiendo acciones más enérgicas para contener la oleada de violencia que nos azota. Para colmo, los delincuentes cada día descubren nuevas maneras de  cometer sus tropelías, como las bandas que utilizan yolas con motores fuera de borda para sembrar el terror entre residentes en La Ciénaga, La Fuente, Los Guandules y La Zurza, entre otros barrios a orillas del Ozama. ¿Qué más nos falta por ver?