Lo que más inquieta del mortificante paso de tortuga que aplica la JCE en la emisión de los boletines que permitirán a la población conocer quién ganó las elecciones celebradas hace ya dos días, es que también en esta ocasión se ha puesto en evidencia la falta de un consenso, como ocurre en los organismos colegiados, a la hora de ofrecer explicaciones de lo que ocurre allí dentro, pues mientras el presidente del tribunal de comicios, el doctor Luis Arias, atribuye el retraso a la doble validación de las actas, el juez Roberto Rosario descarta que esa sea la razón, pues de lo que se trata -a su juicio- es de un problema mas bien técnico que tampoco explicó suficientemente. Es difícil decir, desde fuera, cuál de los jueces tiene la razón, mientras crece a tal punto el clima de tensión post electoral que ya son seis las personas muertas a tiros en enfrentamientos entre dirigentes políticos, y si la cosa sigue como va habrá que seguir contando. Nadie puede culpar a la JCE por estas muertes, producto de la barbarie política y la sinrazón, pero sí de crear las condiciones, con su inexplicable mamoneo, para que sigan produciéndose.
En agenda
Después de la fuga de la cárcel de Rafey de un «preso de confianza» condenado a diez años, quien se alzó además con 400 mil pesos del pago de los obreros que trabajan en la remodelación del recinto, y la posterior fuga de otros cinco reclusos, entre ellos algunos ex policías, cualquiera pensaría que las cosas serían diferentes, más que nada porque a raíz de esos hechos se tomaron medidas drásticas contra la dotación policial responsable de la vigilancia de los reos, removida por completo y puesta bajo investigación para determinar si recibieron algún tipo de soborno. ¡Qué gran error! Cinco reclusos haitianos tomaron las de villadiego la madrugada de ayer, según informó la Policía de Santiago, con lo que alcanzan ya la docena los reclusos que han escapado de Rafey en menos de un mes. Como era de esperarse, la Policía anunció que «persigue activamente» a los prófugos, al igual que a los que todavía andan sueltos por ahí, al tiempo que trata de establecer su identidad interrogando a sus compatriotas y compañeros de celda. Todo indica que el doctor Francisco Domínguez Brito, que ayer anunció su reintegración formal a sus responsabilidades al frente de la Procuraduría General de la Repúlica, tendrá que poner a Rafey en un lugar privilegiado de su agenda.
Mercados
El síndico Roberto Salcedo acaba de prometer, en medio de la euforia triunfalista, que su nueva administración concentrará sus mayores esfuerzos y recursos en la defensa, preservación y rescate de las áreas verdes de la ciudad, sometidas a un grosero proceso de enajenación durante las últimas administraciones edilicias, y a la solución al problema de los mercados de la ciudad, verdaderos centros de contaminación y arrabalización. Salcedo reveló que dentro de tres meses terminará la reconstrucción del mercado de Villa Consuelo, y luego seguirá con el Mercado Nuevo de la avenida Duarte. Tomémosle la palabra al señor síndico, a su promesa de cambiarle el sucio y arrabalizado rostro a nuestros impresentables mercados, confiando en que podamos pronto darle la enhorabuena por honrar la palabra empeñada.