QUE SE DICE
Ojo al dengue

QUE SE DICE<BR> Ojo al dengue

En los barrios periféricos de Santo Domingo, en San Cristóbal y Baní se ha detectado un incremento de los enfermos de dengue en los últimos días, lo que se ha reflejado de inmediato en los hospitales infantil Robert Reid Cabral y Luis Eduardo Aybar.  Como siempre los más afectados son los niños que atacados con más frecuencia por el insecto transmisor, logran alterar la salud de los pequeños. El país necesita que las autoridades de Salud presten la mayor atención a este brote infeccioso porque tras el paso del huracán Jeanne se han creado condiciones para la propagación del mosquito vector de la terrible enfermedad que en años pasados ha provocado numerosas muertes en todo el territorio nacional. No puede esperarse que los simples llamados a higienizar casas y entorno sean suficientes para evitar que el dengue abra una gran brecha entre la población.  Será necesaria una intervención más directa de todos los organismos estatales que tienen entre sus atribuciones la preservación de la salud.

El dedo en la llaga

El embajador de Estados Unidos ante la Organización de Estados Americanos (OEA), John Maisto, acaba de recordar que su país no quiere ver que la impunidad del “borrón y cuenta nueva” cubra los actos de corrupción y los fraudes en el sistema bancario en la República Dominicana. El señor Maisto dijo que la Convención Interamericana contra la Corrupción ha puesto en claro que ese flagelo es el culpable de gran parte de la pobreza que sufren millones de personas en el Continente y los gobiernos democráticos están en el compromiso de combatirla y de perseguir y juzgar a los sospechosos de aprovechar sus posiciones públicas o privadas para estafar a los contribuyentes. Y más claro aun, ha dicho que en breve tiempo esa misma Convención va a pedir cuenta de los progresos que han hecho las naciones para cerrarle el paso a ese viejo acompañante del pueblo dominicano. Los dominicanos más optimistas no pueden hacerse la ilusión de que cuando se pase la cuenta a las acciones contra la corrupción la justicia dominicana, el gobierno y la sociedad misma no tienen mucho que decir y mucho menos que demostrar.

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