El jefe de la Policía Nacional ha prometido a la ciudadanía unas navidades tranquilas y en paz, como Dios manda, pues la institución que dirige mantendrá a raya a los delincuentes con el aumento de la vigilancia y el patrullaje preventivo en las calles mientras duren las fiestas pascueras.

Al participar como orador en un encuentro celebrado el pasado domingo junto al secretario de Interior y Policía y representantes de los 101 sectores integrados a Barrio Seguro tanto en Santiago como en la Capital, el mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín afirmó que una vez se ponga en marcha el plan diseñado para proteger a la ciudadanía en esa especial época del año  los delincuentes estarán más seguros presos en las cárceles que haciendo bellaquerías en las calles. Tranquilizadoras palabras, sin duda, las del jefe policial, sobre todo por venir de un oficial que ha probado, en el desempeño de sus funciones, tener los juegos muy pesados, palabras que  ojalá  hayan  llegado también, por su propia seguridad,  a los oídos de los  delincuentes, que todavía tienen de poner sus barbas en remojo.

  Promesas

En tiempos de campaña electoral, como es lógico y natural, abundan las promesas, para todos los gustos y colores, en labios de  los candidatos, que se despachan a su gusto ofreciendo villas y castillas, conscientes de que la mayoría de esas promesas se irán por el desaguadero, junto a la resaca de ganadores y perdedores, una vez concluya la gran fiesta de la democracia dominicana, y lo peor de todo; muy pocos serán los que las recuerden y los menos, acostumbrados a ser impunemente defraudados elección tras elección, serán los que  se atrevan a exigir su cumplimiento a los desbocados ofertantes. Esa realidad solo cambiará cuando los electores empiecen a reclamarle a los candidatos, un vez se convierten en presidentes electos, que honren esas promesas so pena de retirarles automáticamente su apoyo, y cuanto antes empecemos mucho mejor. ¿Por dónde empezar? Por el ingeniero Miguel Vargas Maldonado, candidato presidencial del PRD, quien en un acto celebrado el fin de semana a propósito del Día de la No Violencia Contra la Mujer, prometió que de ganar las elecciones de mayo próximo las mujeres ocuparán el 50% de los puestos de la administración pública. ¿Será verdad tanta belleza, señoras feministas?

Callejón sin salida

Con su petición de que se declare formalmente abierta la campaña electoral el próximo primero de diciembre los representantes de los partidos Revolucionario Dominicano, Reformista Social Cristiano y Revolucionario Independiente alegan que esa es la mejor salida a la situación jurídica planteada por la resolución 7-2007 que ordena el retiro de la propaganda de los partidos. La verdad, sin embargo, es que esa propuesta   coloca en una posición muy incómoda al  pleno de la Junta Central Electoral, obligado a decidir entre la aceptación pura y simple de la realidad de los hechos legalizando una campaña electoral que empezó hace rato, o jugarse el arriesgado albur de disponer una prohibición que los partidos no están en disposición de acatar y que el tribunal de comicios no está en capacidad de hacer cumplir. En ambos casos la autoridad del tribunal de comicios quedará muy menguada, pero lamentablemente ha sido la propia JCE la que se ha metido en el callejón sin salida.