Qué se dice
Como en otros tiempos

Qué se dice<BR><STRONG>Como en otros tiempos</STRONG>

Lo primero que ha llamado la atención de los acusados de asesinar a la estudiante universitaria Vanessa Ramírez Faña es su juventud, entre los 19 y los 25 años, pero también la saña conque actuaron contra su indefensa víctima, a la que no necesitaban matar a balazos para despojarla del celular que le arrebataron junto con su preciosa vida. Esa precocidad delictiva es el nuevo signo de los tiempos que corren como bien saben, por amarga experiencia, los santiagueros, que han sido impotentes testigos de cómo jóvenes a bordo de motocicletas -sobre todo de las llamadas “pasolas”- se han convertido en verdaderos azotes en las calles de la Ciudad Corazón arrebatando bolsos, cadenas, carteras, celulares o cualquier cosa de valor. Es por eso que tanta gente sigue haciéndose la misma pregunta: ¿por qué no prohibir que tanto en las “pasolas” como en los llamados motores saltamontes -en los que ningún padre de familia concha- se monte más de una persona? A lo mejor alguien protesta diciendo que hemos vuelto a tiempos felizmente superados, pero ese es un precio irrisorio si la medida contribuye a devolverle la tranquilidad a la ciudadanía y, más que nada, a salvar vidas.

Optimismo

  Mientras se agitan de mala manera las aguas internas perredeístas producto de la resaca de la derrota electoral, doña Milagros Ortiz Bosch anda por ahí derrochando optimismo, convencida -y así lo proclama a los cuatro vientos- de que el PRD regresará al poder en las elecciones presidenciales, es decir dentro de tan solo dos años. La ex vicepresidenta de la República dice que nadie debe sorprenderse si el PRD vuelve al poder, pues cuando el PLD perdió las elecciones del año 2000 quedó en peores condiciones que las que hoy exhibe su partido, y sin embargo regresó al Palacio Nacional antes de lo que podría esperarse. ¿Cómo fue posible tal hazaña? Gracias a un PLD que supo, según doña Milagros, imponerse a sus errores y actuar con inteligencia política. Por ninguna parte menciona la contribución a ese regreso que significó el pésimo desempeño del gobierno en el que fue segunda al mando, sin duda decisivo para que el doctor Leonel Fernández regresara al Palacio Nacional sobre una alfombra de votos. ¿Amnesia selectiva?

Excusas

  Dado su temperamento y vehemencia habrá quien considere que el doctor Marino Vinicio Castillo (Vincho) ve la presencia del narcotráfico hasta en la sopa, sobre todo después de escucharle oponerse a que se utilice la asamblea constituyente como mecanismo para modificar la Constitución de la República, pues podría ser infiltrado por personas vinculadas con el narcotráfico. Castillo recordó su denuncia de que en las pasadas elecciones tuvo en sus manos el expediente de una persona vinculada al narcotráfico que aspiraba a diputado, en lo que finalmente fracasó, pero ni en aquella ocasión ni en esta ha querido revelar el nombre de ese candidato. La advertencia, como otras tantas paridas por la proverbial vehemencia del asesor presidencial en materia de drogas, parece más espuma que chocolate, pero al menos ha dado al gobierno otra excusa para sacarle el cuerpo al mecanismo que de manera consistente ha propuesto el PLD cada vez que en los últimos tiempos se ha hablado de modificar la Constitución.

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