El Almirante Sigfrido Pared Pérez ha querido curarse en salud al explicar con suficiente anticipación las razones de la «visita operativa» que hará el próximo lunes al país el destructor norteamericano «Stout», como parte de los ejercicios de entrenamiento que realizan de manera conjunta el ejército de Estados Unidos y las Fuerzas Armadas dominicanas, en este caso la Marina de Guerra.

Se adelanta así el secretario de las Fuerzas Armadas al previsible alboroto que provocará la presencia de la nave de guerra norteamericana en nuestras costas, como ha ocurrido con las tropas de ese país acantonadas en Barahona como parte de los ejercicios conjuntos bautizados como Nuevos Horizontes. Pared Pérez explicó que la del destructor es una visita «normal», al igual que las que anteriormente han realizado al país buques escuelas de Venezuela, Colombia o España, entre otros países amigos, como queriendo decir que no hay que buscarle la quinta pata al gato. Así que ya lo saben Narciso Isa Conde y compartes, al igual que todos aquellos a los que resulta difícil de entender las razones por las cuales los americanos envían soldados y no hermanitas de la caridad a realizar tareas «humanitarias» a este pobre y jodido país.

Una ley absoleta

  El Procurador General de la República, Adolfo Espiñeira, ha prometido que las autoridades del Ministero Público serán drásticas con los violadores de las leyes de tránsito en estos días de carreteras congestionadas a causa del feriado de Semana santa, sobre todo con los que manejan de manera imprudente y los que conduzcan en estado de embriaguez, pues suelen ser causantes de una gran cantidad de accidentes, muchos de ellos fatales. Hay que decir, sin embargo, que no será en la obsoleta ley 241 donde las autoridades encontrarán la drasticidad necesaria para meter en cintura a tanto desaprensivo irresponsable que anda por ahí con un guía en la mano, pues esa legislación está necesitada de una urgente reforma y adecuación, sobre todo en lo referente al monto de las multas que se imponen. De la apremiante necesidad de hacer esa reforma hablaba ayer, precisamente, el general José Fernández Fadul, quien en su calidad de director general de AMET coordina un amplio operativo de prevención en todo el país. Lástima que solo nos acordemos del paraguas cuando escuchamos los truenos.

Creyentes y gentiles

  Nada mas y nadas menos que seis adjetivos utilizó al cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez para definir a quienes utilizan estos días de recogimiento y reflexión para promover fiestas y francachelas, como parte del proceso de paganización, por llamarlo de alguna manera, que ha venido sufriendo una celebración que hace tan solo veinte años tenía rasgos estrictamente religiosos. Pero no todo el mundo, como bien sabe el cardenal por experiencia propia, se va a las playas y resorts del país a darle gusto al cuerpo y los sentidos, pues cada vez son mas los que prefieren quedarse a disfrutar la inusual quietud de la ciudad junto a sus familias, como lo demuestran los templos atestados de fieles y creyentes. Culpas del tiempo son y no de España, como también sabe su Eminentísima Reverendísima, sin dejar de mencionar un regalo tan maravilloso como el Libre Albedrío.