Mucho preocupa la denuncia sobre la alegada comercialización en el país de combustibles adulterados, incluyendo los que en algún lugar del Este se habrían suministrado para uso en la aviación. De acuerdo con lo expresado en ese sentido por la Secretaria de Industria y Comercio, licenciada Sonia Guzmán de Hernández los problemas relacionados con la calidad de los combustibles para aeronaves motivó el envío a un importante aeropuerto de un equipo militar. La denuncia es grave pero lamentablemente no incluyó nombres de empresas ni de personas ni de sitios específicos, por lo que tales hechos quedan un poco en el aire. Como en el aire ha estado siempre en este país la calidad real de los carburantes; el verdadero octanaje de cada tipo de gasolina, algo que debería certificar algún organismo técnico reconocido internacionalmente, desvinculado por completo de las empresas que importan, destilan y comercializan derivados del petróleo. Esa sería la única forma de comenzar a darles a los automovilistas las seguridades que requiere sobre el efecto de los combustibles que echan a sus vehículos que pueden ser pésimos y nocivos aunque no hayan sido sometidos a adulteración en los canales de distribución.
Crítico autorizado
Afirmar que el doctor Bernardo Defilló superintendente de Salud y Riesgos Laborales formuló recientemente críticas muy fuertes sobre los problemas de los hospitales para congraciarse con el nuevo gobierno como declaró el Secretario de Salud, José Rodríguez Soldevila- no se compadece con lo que ha sido la trayectoria y hoja de servicio del respetado médico internista y funcionario del naciente sistema de seguridad social. Muy temprano en su vida, Defilló alcanzó relieve y reconocimiento como dirigente de organizaciones estudiantiles. Coherentemente, ha sido un crítico que levanta la voz cada vez que considera necesario alertar al país sobre situaciones preocupantes en materia de salud. Su sólida formación profesional y dedicación cientifica le han permitido hablar con autoridad para alertar y motivar la búsqueda de soluciones en asuntos de salubridad. La visión que hace poco ofreció el superintendente de Salud sobre los centros asistenciales del Estado coincide con la de muchos otros dominicanos, incluyendo funcionarios del mismo nivel de Soldevila.
Bajas por partida doble
En la baja del dólar podría estar influyendo, a juicio de analistas, la drástica reducción en la demanda de moneda dura para la importación de combustibles para la generación de electricidad, más el retraso en la adquisición de gas propano que se ha hecho constante en las últimas semanas. Sería también señal del enfriamiento de la economía, pues las alzas generalizadas del último año mantienen en baja muchos niveles de consumo y por tanto la economía importa más. Ayer la divisa estaba ya muy cerca del 40 pesos por un dólar. La apreciación sobre el enfriamiento se corresponde con estadísticas del Banco Mundial que calculan que en el cuadrienio que finaliza, el número de pobres en República Dominicana aumentó en un millón. El país necesita que el dólar se estabilice en niveles inferiores en los de esta semana, pero no por efecto de una baja en la calidad de vida, sino por el retorno de ahorros y capitales y por la confianza de inversionistas a partir del cambio de gobierno.