El gobierno debería explicar porqué se sentó a negociar las soluciones definitivas a los eternos problemas del transporte de pasajeros con el Consejo Sindical y Empresarial del Transporte (CONSETRAN) si pensaba abandonar esas negociaciones a medio camino, sin ninguna explicación y dejando en el aire los trece puntos pactados con el ingeniero Diandino Peña, director de la OPRET, un principio de acuerdo que logró desactivar la huelga convocada para el pasado 30 de enero.

¿Ganar tiempo, burlarse de los transportistas, jugar con candela? Juan Hubieres, Ramón Pérez Figuereo y Alfredo Linares (Cambita), emplazaron a las autoridades a cumplir con esos puntos a más tardar mañana viernes, o de lo contrario retornarán a las calles a reclamar por la fuerza lo que creían haber conquistado a través de la negociación y el diálogo civilizado. Mientras los transportistas hacen sonar sus tambores de guerra, con todas las implicaciones que ese anuncio tiene para la tranquilidad ciudadana y el sagrado orden público, el ingeniero Diandino Peña anda tan perdido como los papeles del Metro que un tribunal le ordenó entregar al periodista Huchi Lora.

Hacia la ley seca
Al paso que vamos, perdonando la exageración, los impuestos conseguirán lo que no ha podido lograr el doctor Franklin Almeyda, secretario de Interior y Policía, a través de las regulaciones al consumo y venta de bebidas alcohólicas: imponer la ley seca. La empresa Brugal y compañía reveló ayer que, por tercer año consecutivo, se han reducido las ventas de ron en el mercado local, tanto así que en los primeros cuatro meses del año descendieron un 17%, lo que sus ejecutivos atribuyen a la “saturación tributaria”. Conocidas son ya las dificultades por las que vienen atravesando las industrias cerveceras instaladas en el país, al extremo de que la Cervecería Nacional Dominicana, patrocinadora del Festival Presidente de Música Latina, uno de los más importantes y prestigiosos eventos artísticos del continente, se vio forzada a suspender el esperado espectáculo debido, precisamente, a la dramática caída en sus ventas tras la última reforma impositiva.

Tiempo de reformas
Como era de esperarse tratándose de un instrumento jurídico tan criticado, el proyecto de ley de reforma al Código Procesal Penal sometido al Congreso Nacional por el Poder Ejecutivo ha sido recibido con general beneplácito, en la esperanza de corregir sus deficiencias y limitaciones. Otro tanto habrá que hacer, más temprano que tarde, con el Código del Menor, pues el creciente involucramiento de menores en hechos delictivos, en ocasiones con la anuencia o complicidad de padres y tutores, obligan a su readecuación, a fin de ajustarlo a esa terrible realidad. Eso es precisamente lo que plantea el vocero de la división norte de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), Abel Rojas Helena, preocupado por la facilidad conque los menores infractores son puestos en libertad. En abono a esa preocupación, aporta cifras que no ameritan explicaciones: un total de 61 menores fueron sometidos, por asuntos de drogas, al Tribunal de Niños, Niñas y Adolescentes de Santiago en lo que va de año, pero solo un procentaje mínimo fue enviado a prisión a pesar de que muchos de esos menores dirigían puntos de drogas y de que su utilización por parte del narcotráfico ha adquirido, según el vocero de la DNCD, dimensiones alarmantes.