Luego del famoso Título 42, la medida que adoptó el expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, y que continuó el presidente Joe Biden para expulsar a migrantes debido a la pandemia como una declaración de emergencia y que se venció el pasado jueves 11 de mayo, el gobierno estadounidense hará uso de otra vieja normativa, el Título 8, con la que busca deportar a migrantes que no cumplan con las condiciones de permanencia legal en esa nación.

Esta medida es parte de un cambio rotundo en la política interna de Estados Unidos sobre los migrantes que arriban a ese potencia, esperanzados de que se le conceda un asilo, consideró la abogada experta en temas migratorios, Scania Encarnación, quien añadió que la decisión del gobierno de Biden ha provocado incertidumbre y desesperación, ya que se adelantó la fecha de vencimiento de la antigua normativa con la que muchos latinoamericanos se beneficiaron.

«Ahora , con el Título 8, el cual va a sustituir el Título 42, el Departamento de Seguridad Nacional busca imponer consecuencias más graves a las personas que intenten cruzar la frontera, sin haber solicitado asilo antes y en consecuencia serán expulsados de inmediato».

Scania Encarnación.

Previo a esto, la práctica tras el cambio de gobierno en el 2021, luego del migrante ser detenido era llevado a los albergues para ser citados y vistos por un juez para determinar su situación, ante esto el migrante tenía la oportunidad de entrar y permanecer dentro del territorio Estadounidense, mientras se tomara una decisión.

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Respecto a los dominicanos, la también experta abogada experta en temas migratorios, Raysa Cuevas, explicó: «Lo que vamos a obtener cuando migramos a los Estados Unidos son plazos: un parole para permanecer dentro de los Estados Unidos durante el proceso de la solicitud de un asilo, iremos a audiencia y agotar el procedimiento. Solamente tenemos un plazo para permanecer en los Estados Unidos. Pero no es que adquieren una residencia permanente de los Estados Unidos, ni que tampoco se hará muy fácil poder obtenerla, porque no somos un país donde estamos en crisis, ni donde se está persiguiendo a nadie ni por la etnia, ni por color, etcétera. Pero al final, para poder tener un estatus legal sería muy difícil, salvo excepciones. Lo que viene son deportaciones masivas de las que fueron por la vuelta por México y seguirán deportando. Nosotros no calificamos para asilo, salvo excepciones».