Hoy 
Un paseo de tarde por la bahía de Cartagena es un privilegio que no debes perderte.
Explorar su rica y fascinante historia con un paseo por su centro histórico, donde antes las murallas eran utilizadas para disparar los cañones y hoy son propicias para acoger a parejas de enamorados que ven el atardecer de frente al mar.
En la Ciudad Amurallada está el Castillo de San Felipe de Barajas, una bien cuidada fortaleza militar, que fue construida por los españoles durante la época, y es la más grande del continente Americano.
La ruta turística debes continuarla visitando Las Bóvedas que están localizadas entre los fuertes Santa Clara y Santa Catalina, en total son 23. Fueron construidas entre 1792 y 1796 y eran usadas como depósitos de municiones. Durante la época republicana las bóvedas fueron utilizadas como cárceles. Hoy en día son un conjunto de almacenes donde se pueden encontrar una variedad de tiendas de artesanías, allí puedes aprovechar para comprar los souvenirs que llevarás a tus seres queridos cuando regreses a tu tierra.
Caminar por el callejón de los Estribos es una experiencia que debes vivir, ahí te encuentras con la estatua viviente de un pescador que de una forma muy divertida hace mover el pescado que lleva, cuando le ponen dinero. Luego te encontrarás con la plaza Santo Domingo, donde está la genial obra de Botero que los cartageneros llaman cariñosamente la Gorda Gertrudis.
El paseo debes continuarlo por la Plaza de San Pedro Claver, que debe su nombre en honor al santo conocido como “Esclavo de los Esclavos”. La labor de San Pedro Claver fue evangelizar a los negros y enseñarles las creencias católicas. Es una plaza de encuentro familiar su mayor atractivo en las tardes son las palomas que se reúnen allí para ser alimentadas con maíz por los visitantes. Si la visitas de noche puedes disfrutar de una romántica velada en el restaurante San Pedro.
Una visita que no debes olvidar es la del Palacio de la Inquisición y Museo Histórico, y es que en septiembre de 1610 fue instaurada la inquisición en Cartagena de Indias para juzgar los delitos contra la fe cristiana. El tribunal de Penas del Santo Oficio adoptó como sede principal este palacio que es una de las construcciones más elegantes y características de la época colonial de la ciudad. El palacio es hoy un museo en donde se puede visitar lo que en su momento fueron cárceles y cámaras de tortura, además de encontrar documentos históricos.
Y finalmente, las playas. Están a pocos metros de las antiguas murallas de la Ciudad Vieja. También se extienden alrededor de la península de Bocagrande y Laguito.
