La pregunta no es ociosa, no trata de determinar quiénes fueron los responsables del aborto a las elecciones municipales del 16 de febrero, que ha provocado una crisis electoral y no ha devenido en una política por la cordura y responsabilidad de los líderes de la oposición, pero es importante determinar quienes patrocinaron y apoyaron un sistema tan vulnerable y propenso a facilitar fraudes electorales.
El primer acto de esta comedia fue desacreditar los escáneres adquiridos por la anterior JCE, presidida por Roberto Rosario, dispositivos que algunos presentaron fallos en los comicios de 2016, pero no era motivo para descartarlos sin realizar una auditoría forense. En enero de 2019 los actuales miembros de la JCE sometieron a los partidos políticos un denominado sistema de voto automatizado con un software elaborado internamente y que en principio fue bien recibido por todos.
Desde el primer momento Participación Ciudadana y la presidenta de Transparencia Internacional, Delia Ferrera, advirtieron de la vulnerabilidad de los sistemas de votación electrónica y por ello propusieron una auditoria a los equipos y el software, lo cual en principio fue aceptado por la JCE y plasmado en una resolución para realizarla en febrero de 2019, aunque nunca se hizo.
Llega octubre y lo que en principio se planteó como un plan piloto para las primarias, la realidad fue que el precandidato Leonel Fernández participó en una contienda, con un voto automatizado no auditado y sin que ninguna de sus propuestas fuera aceptada.
Con lo acontecido en las municipales se ha revelado que en la “personalización” de los equipos es posible truncar las boletas, por eso algunos votantes en las primarias alegaron que no salía la foto de Leonel Fernández, también era posible introducir un algoritmo para que votos emitidos por un candidato se aplicaran a otros, por supuesto también se descubrió que con una foto al código QR de las cédulas se lograron muchos votos para el oficialismo, no es accidental que Participación Ciudadana calificara de ilegitimo el proceso.
Con ese precedente, además de las auditorias parciales de Alhambra y la IFES, se suponía que el sistema debió funcionar como un reloj suizo para corroborar las tantas ocasiones que el presidente de la JCE elogió la fortaleza y seguridad del sistema.
Hay muchas preguntas por responder acerca de las causas del colapso del voto automatizado, lo cual demostró que tuvo razón el Dr. Leonel Fernández al oponerse a su utilización en las municipales, por ello la JCE es la principal responsable de haber adoptado un sistema confiando ciega e ingenuamente en la tecnología, en los técnicos de la institución y en la pulcritud de los actores políticos.
Pero la JCE no es la única responsable, lo es el partido de Gobierno que preparó un guión que comenzó con la implementación de primarias abiertas, originalmente simultáneas y obligatorias, y apoyo irrestricto a la JCE en la utilización del voto automatizado en las primarias y en las municipales, para luego en las de mayo.
También son responsables la cúpula empresarial y ciertos medios de comunicación que apoyaron el sistema, sin disponer de las garantías y haciendo caso omiso a las denuncias de fraude en las primarias del PLD.
Este golpe a la democracia, sea por fallas tecnológicas o por un intento de fraude, ha despertado la conciencia nacional, que se ha manifestado en protestas pacíficas en todo el país y los “cacerolazos”, colocando en graves aprietos al gobierno y a un partido ya de por si disminuido por la división.