POR ALEIDA PLASENCIA
Los productores de más de 15 mil tareas sembradas de guineos en Hatillo Palma, en    la Línea Noroeste, todavía ayer viernes no habían podido entrar a sus fincas, a consecuencia de las inundaciones.

Hatillo Palma, donde se encuentra la mayor  concentración de cultivos de guineos de la Línea Noroeste, está inundada e  impenetrable, por el desborde del río Yaque del Norte, aunque no toda la plantación estaría dañada, según  informó  el ingeniero Luis Bonilla, productor de guineos.

Bonilla aclaró que su finca no se encuentra inundada, aunque está ubicada   en área cercana.

Según informe oficial, los daños ocasionados a la producción de alimentos agrícolas por efecto de la tormenta  Noel han sido devastadores, principalmente en  todo lo que tiene que ver con viandas, vegetales, cereales  y algunos frutales, como aguacates. Sufrieron daños de consideración  a nivel nacional plantaciones  de arroz, guineos, plátanos, cebolla, yautía y yuca, entre otros cultivos.

De acuerdo a lo explicado por Bonilla, de  Mao a Monte Cristi más de 30 mil tareas sembradas de bananos están inundadas, aunque no todas las plantaciones se encuentran   dañadas.

Al ser consultado respecto  a la situación de las plantaciones de bananos, el ingeniero Bonilla recordó que los agricultores de la Línea Noroeste sufrieron también serios daños en sus plantaciones por inundaciones y tornados ocurridos a mediados del  presente año.

Hizo un llamado al gobierno para que acuda en auxilio de los productores de bananos de la Línea Noroeste con recursos prestados a través del Banco Agrícola, para salvar de la quiebra tanto  a los agricultores  afectados por la tormenta Noel como aquellos que sufrieron  pérdidas por los aguaceros y tornados de meses pasados.

No obstante, dijo que el sector no tiene esperanza de auxilio del Gobierno, pues habían solicitado préstamos por RD$400 millones   para reponer las fincas de inundaciones  anteriores y  nada consiguieron.

 Manifestó Bonilla que si el gobierno hubiera facilitado recursos  a los productores de bananos  afectados por inundaciones anteriores,  éstos estuvieran en mejor condición en cuanto a producción para responder a la demanda interna que se generará más adelante tras las devastaciones de plantaciones de distintos alimentos recién ocurridas.