El Parque Ecológico de Los Alcarrizos, un área que estuvo abandonada se ha convertido poco a poco en un lugar donde religiosos, empleados de instituciones públicas y privadas, profesionales y habitantes de la zona acuden los fines de semana para aprovechar del espacio y compartir en familia.

En este lugar donde a penas funcionaba un vivero para la producción de plántula en un área de alrededor de cinco tareas, el Ministerio Ambiente lo ha convertido en un Parque donde los ciudadanos tienen la oportunidad de visitar de manera gratuita.

Antes el área estaba sin una protección y manejo adecuado, lo que permitió que fuera ocupado por personas de los alrededores y convirtiéndolo en una zona arrabalizada.

Jaime David Fernández Mirabal inició el proceso de restauración del área para que los dominicanos puedan disfrutar de la belleza y la naturaleza del lugar, que le sirviera de esparcimiento a las familias.

El Plan Nacional Quisqueya Verde mantiene el cuidado donde se han plantado y recuperado caoba, palmas, roble,

El técnico en ciencia forestales, Sandro Santana Polanco, comenta que al parque van muchas personas a recrearse, donde también se han celebrado bodas, cumpleaños, así como aniversario de instituciones.

Además en este lugar se han hecho conciertos, mientras que las iglesias evangélicas han realizado actividades religiosas y recreativas. 

Los días que mayormente las personas frecuentan el parque son los domingos, sin embargo, diariamente las personas que viven en los alrededores aprovechan el lugar para recrearse, donde antes se hacían todas actividades delictivas.

La situación fue controlada con el acondicionamiento y la vigilancia, donde se protegen los árboles y se han plantado varias especies para mantener el equilibrio ecológico de la zona.

Israel de Jesús, uno de los vecinos dijo que el acondicionamiento del lugar se ha constituido en un pulmón de la comunidad, donde los árboles purifican el aire, y combaten la contaminación que se produce por el movimiento de los vehículos y las fábricas.

Explicó que las gentes hacen sus actividades porque tienen acceso al área, muchos vienen a recrearse en este lugar, además que cuidan lo que hay plantado, lo que se ha convertido en una bendición para los jóvenes, donde se divierten y disfrutan de los árboles plantadas.

Fainely Berroa, entiende que la recuperación del área ha sido importante para quienes viven en los alrededores, especialmente jóvenes que pueden visitar el lugar para jugar y los niños corretear en la zona.