POR PEDRO GERMOSEN
Las Fuerzas Armadas retiraron los militares asignados a las residencias de los senadores Angel Dignócratez Pérez, de Pedernales, y César Díaz Filpo, de Azua, quien atribuyó la medida a un plan político del Gobierno contra los legisladores del Partido Revolucionario Dominicano (PRD).

Sin embargo, otros senadores perredeístas, entre ellos Vicente Castillo, de Peravia; Pedro Antonio Luna, de Sánchez Ramírez, y Tommy Durán, de Puerto Plata, dijeron que todavía ayer tarde no se les había notificado el retiro de las escoltas.

De todas formas, estimaron que el retiro de la protección de las viviendas de Díaz Filpo y Pérez debe ser reconsiderado por la secretaría de las Fuerzas Armadas.

Díaz Filpo se mostró sorprendido del retiro de los tres militares que custodiaban su residencia en la ciudad de Azua y agregó que la medida deja a sus familiares desprotegidos en momentos en que la criminalidad está en auge.

Dijo que no quería relacionar esta disposición con la ola de cancelaciones, atropellos y abusos contra perredeístas que laboraban en el Estado.

Recordó que el aumento de la custodia de los miembros del Senado fue dispuesto a raíz del asesinato del senador Darío Gómez Martínez, ocurrido el 12 de diciembre del 2001.

Díaz Filpo mostró una comunicación del coronel Jorge González Martínez, del Ejército, a través de la cual se le comunica el retiro de la custodia de su residencia, que integraban el sargento Julián J. Tejeda Méndez y los cabos Alexander Pérez Soriano y Tavárez de la Cruz Guzmán.

El coronel González Martínez también remitió al senador Díaz Filpo otra comunicación de fecha 30 de septiembre de este año en la que el general Paulino P. Medina Gratereaux, remite al militar un memorándum del jefe de Estado Mayor del Ejército para que le dé estrictamente cumplimiento al decreto 78-2002, mediante el cual se establece la cantidad de militares asignados como custodias a funcionarios y legisladores.

El documento precisa que los miembros del Poder Legislativo sólo tendrán derecho a obtener los servicios de un alistado-chofer, al igual que los secretarios de Estado y directores generales.

Consultado sobre el retiro de las escoltas de las residencias de Díaz Filpo y Pérez, el senador Castillo, de Peravia, pidió la revisión de estos casos, pero descartó que se trate de retaliación política.

Castillo manifestó que puede ser un error que debe ser enmendado porque se trata, expresó, de dos senadores respetuosos de las leyes y muy meritorios.

Por su lado, Tommy Durán dijo que no le han quitado la custodia de su residencia en Puerto Plata porque nunca la he tenido y agregó que allí sólo cuida de la vivienda un perro.

Expresó que tiene asignado un solo militar que le asiste cuando él está aquí en la capital y agregó que ese custodia lo acompañó el día de ayer.

Sin embargo, Durán expresó que la realidad es que las nuevas autoridades están desprotegiendo a los congresistas para aumentar la protección de sus gentes.

«He oído que los están quitando para ponérselos a otros», apuntó el legislador del PRD.