Radhamés Gómez Pepín, clásico del periodismo dominicano (2)

Radhamés Gómez Pepín, clásico del periodismo dominicano (2)

Durante 62 años  libró contiendas  infatigables por la libertad y la equidad y  por su apostolado de pluma vibrante se corona como un ícono  y un clásico del periodismo dominicano.
– 1964: Asistente del director del Listín Diario, Rafael Herrera.
– 1964: Jefe de Redacción de El Caribe. Cuando comenzó la guerra, el sábado 24 de abril de 1965, fungía como jefe de Redacción de El Caribe, ubicado en la calle El Conde número 1, esquina Las Damas. Los aviones de San Isidro y desde Villa Duarte tiraban hacia el enclave de los constitucionalistas: la fortaleza Ozama, que estaba contigua al matutino. Su director y propietario, Germán Emilio Ornes Coiscou, se encontraba en el extranjero, y como principal ejecutivo presente, Gómez Pepín dispuso que los periodistas no salieran a las calles.
Desde la azotea del propio periódico, cubrió la batalla del Puente Duarte, y nada más ver que los tanques y las tropas del CEFA no lograron cruzar el puente, Gómez Pepín escribió una reseña sobre el avance de las fuerzas regulares contra los constitucionalistas. Gómez Pepín recogió la declaración, en unos pocos párrafos, que el doctor Ornes Coiscou le autorizó publicar.

Esta información fue crucial en el curso de los acontecimientos, porque divulgada en un medio de prestigio y credibilidad, revirtió el ánimo de muchos constitucionalistas que se habían refugiado en embajadas y otros lugares, y decidieron salir y sumarse a la lucha armada.

En la confusión de los días iniciales, impartió instrucciones a este por la vía telefónica, y el día 28 el matutino dejó de circular. El día 29, El Caribe ni el Listín Diario refirieron ningún triunfo de los rebeldes, por cuanto, en la mañana, el coronel Francis Caamaño se apersonó a ambos medios, proclamando haber ganado la batalla y estar al mando de la revolución.

Cerrado El Caribe, con hijos y esposa, Gómez Pepín regresó a Santiago, a la casa de Güela, lo mismo que millares de habitantes de la Capital que se resguardaron por meses en ciudades, pueblos y campos de todo el territorio nacional.

El martes 30 de noviembre de 1965 participó en un acto efectuado en la tumba del asesinado periodista del Listín Diario Luis Reyes Acosta, en el cementerio de la avenida Máximo Gómez, donde unos 40 colegas depositaron coronas de flores y se leyó un panegírico.

– 1965: Corresponsal de Prensa Asociada (AP).

– 1966: Miembro del staff fundador del vespertino El Nacional, y encargado adjunto de la mesa de redacción, hasta 1971.

Este mismo año murió doña Vilma Sánchez, también madre de Ramón Euclides Sánchez, en un episodio de gran dolor para Gómez Pepín y toda su familia. Ese mismo año comenzó el régimen de Joaquín Balaguer con un rosario de muertes, desapariciones, persecuciones, apresamientos, deportaciones y muchos otros cruentos incidentes, en algunos de los cuales Gómez Pepín fue a veces mediador, protector y hasta víctima.

En 1967 se casó con Mercedita Navarro, una empleada de El Nacional, cuyo matrimonio fue celebrado en plena redacción del periódico, y que un año después trajo al mundo a su tercer hijo: César Rafael Gómez Navarro. A unos meses de la segunda boda, el 23 de agosto de 1967, la Policía Nacional allanó la pensión de la avenida Bolívar número 36, donde residía con doña Mercedita, y en un aljibe encontraron armas de la Revolución Constitucionalista.

Gómez Pepín fue arrestado cuando cubría el allanamiento, junto con el también pensionista doctor Héctor Cabral Ortega, abogado reconocido por defender a izquierdistas, más a cinco miembros de la familia propietaria de la hospedería. Recluido en la celda conocida como Vietnam, en el pabellón número 6, en la cárcel de La Victoria, en compañía de 116 presos comunes, al otro día fue acusado ante la justicia de quebrantar la Ley 36 sobre Porte y Tenencia de Armas de Fuego.

La acusación de traficar con armas desató la alarma mediática: mal traficaría con armas un periodista que se refugió en Santiago y se mantuvo al margen de la Revolución Constitucionalista, y en la prisión de diez días fueron retumbantes las demostraciones de solidaridad. Presidiarios escoltaron voluntariamente a Gómez Pepín y a Cabral Ortega. Fueron puestos en libertad el 28 de agosto, por falta de indicios de culpabilidad.

En marzo de 1970, en el complicado episodio del secuestro del agregado militar de la embajada de Estados Unidos, coronel Donald Joseph Crowley, que mantuvo en vilo al país, el jefe de la Policía Nacional, general Rafael Guillermo Guzmán Acosta, le encargó la redacción del documento mediante el cual las autoridades le otorgaban la libertad a 21 presos políticos de las izquierdas, a cambio de la liberación de este miembro prominente de la misión diplomática, raptado por el Movimiento Popular Dominicano (MPD) luego de participar en un juego de polo en terrenos del hotel El Embajador.

El 3 de agosto de 1971, la Dirección General de Migración le impidió reingresar a la República Dominicana, junto al periodista Silvio Herasme Peña, por haber participado en Cuba en la celebración del 18 aniversario de la revolución liderada por Fidel Castro. Ese viaje fue interpretado como un desafió al presidente Joaquín Balaguer, quien les dejó varados en Madrid, España, por un par de semanas. El incidente trajo gran inquietud y preocupación en su familia, en particular a don Ramón Gómez, quien estaba en lecho de muerte. El día 8 de ese mismo mes regresó desde la capital española, tras el jefe del Estado disponer el levantamiento de la sanción.

En 1972 formó parte de la comisión mediadora que buscó preservar la vida a cuatro miembros del grupo de la izquierda denominado Los Palmeros, perseguidos por la Policía Nacional, acusados de asaltar el Royal Bank. Se acantonaron en un escondrijo entre rocas, en el kilómetro 14 de la Autopista de las Américas, donde resistieron la ofensiva de las fuerzas regulares, que en un despliegue extraordinario de recursos, utilizaron centenares de tropas, tanques y aviones que requirieron más de ocho horas para abatir a los cuatro revolucionarios.

– 1972, director de Noti-Tiempo, de Radio Comercial.

El 3 de febrero de 1973 se produjo el desembarco de Playa Caracoles, comandado por el coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó, quien terminó fusilado sumariamente luego que lo capturaran con vida. Eran nueve hombres y solo sobrevivieron tres: Toribio Peña Jáquez, Hamlet Hermann Pérez y Claudio Caamaño. Este último, en el mes de abril, en una aventura en solitario logró ingresar a la capital y se refugió en casa de unos amigos, en la avenida Bolívar. Pretendía asilarse, algo que sería imposible porque todas las embajadas estaban custodiadas por efectivos del Gobierno. Entonces contactaron a Gómez Pepín, quien gestionó y logró su ingreso en la embajada de México, a través del entonces arzobispo coadjutor de Santo Domingo, monseñor Hugo Eduardo Polanco Brito.

1973, Director ejecutivo del vespertino La Noticia.

En septiembre de 1973 le encargan llevar a París, Francia, a Manfredo Casado Villar, izquierdista nativo de San José de Ocoa, a quien no le habían permitido marcharse del país, pese a llevar más de un año asilado en la embajada de México. Forzó su salida con un presunto secuestro al hijo del embajador, don Francisco Espartaco García. En el largo viaje en compañía de este izquierdista, Gómez Pepín palpitó de cerca la opresión y la histeria generalizada en el mundo a causa de la Guerra Fría.
En 1974, director general El Sol, hasta 1977.

Tras divorciarse, en 1974 contrajo terceras nupcias con Marcia Liz Castellanos, con quien procreó a sus dos primeras hijas: Ana Patricia y Laura Gómez Liz.

Luego de unos meses de este matutino haber sido trasladado desde Santiago a la capital tuvo una etapa de particular afecto, al frente de una redacción con un grupo inusitado de mujeres periodistas: Clara Leyla Alfonso, Ángela Butten, Minerva Isa, Eunice Lluberes, Altagracia Rodríguez, Pía Rodríguez y Cornelia Margarita, que le imprimieron singularidad y entusiasmo al trabajo en medio de considerables limitaciones materiales.

La plantilla de El Sol también contó con una pléyade de periodistas varones: Juan José Ayuso, Fermín Arias Belliart, Víctor Manzueta, Félix Calvo, Héctor J. Cruz, Jaime Domínguez, Leo Reyes, Alfredo Freites, José Labourt, Mirtilio Féliz Peña, Claudio Cabrera, Oscar López Reyes, Eduardo Pérez, Gustavo Rodríguez, entre otros.

– 1977, Director de Noticiario Popular, en Radio Popular.

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