El antesalista Rafael Devers fue uno de los principales jugadores ofensivos dominicanos de la Liga Americana en el 2019, cuando bateó para .311, con 32 jonrones y 115 remolcadas, además de porcentaje de embasarse de .361 y slugging de .555.
Devers superó los 200 hits (201) y acumuló un WAR de 4.9, siendo un fuerte candidato para el premio al Jugador Más Valioso de la Liga Americana. En la temporada recortada del 2020, debe aprovechar al máximo y poner números prorrateados muy similares o mejores a los conseguidos en el 2019.
Nelson Cruz es otro nombre a seguir, siendo el líder de cuadrangulares entre los dominicanos, con 41 vuelacercas. Ciertamente, Cruz jugará la temporada con 39 años de edad, pero su condición física se mantiene óptima y se anticipa una producción similar a la que lo llevó a mantener un porcentaje de embasarse de .392 y slugging de .639.
Ese liderato de jonrones entre los dominicanos de Cruz podría ser retado por su compañero de equipo Miguel Sanó, que sacó la bola del parque en 34 ocasiones en apenas 105 encuentros. Si supera la COVID-19 sin consecuencias, debe rendir mucho este año.
No se sorprendan si vemos una explosión de poder de Eloy Jiménez, de los Medias Blancas de Chicago, en su segunda temporada en las Grandes Ligas. Como novato, Jiménez conectó 31 vuelacercas y se anticipa que podría coquetear con unos 15 en la campaña de 60 juegos.
Algo parecido podemos decir de Vladimir Guerrero Jr., quien ahora tiene menos presión al ser movido a primera base. Guerrero Jr. disparó 15 vuelacercas como novato de los Azulejos en una posición que no dominaba. En el 2020 podría repetir esa suma, pero en los dos meses que se jugará.
Carlos Santana viene de registrar la mejor temporada ofensiva de su carrera y estando saludable no hay por qué pensar que no podría mantenerse en el 2020. Lo mismo puede decirse de Edwin Encarnación, que ahora con los Medias Blancas de Chicago y en una alineación latina debe destacarse.
También se espera una recuperación total de Gary Sánchez, un bate temible de los Yanquis de Nueva York, quien pegó 34 jonrones en solo 106 juegos la pasada campaña.