Celia Cruz, esa gran figura del espectáculo, popularizó a todo lo largo y ancho del continente una contagiosa guaracha que hablaba de una garata con puños escenificada en un patio cualquiera, cuya letra dice más o menos así:

«Burundanga le dio a Muchilanga; Muchilanga le dio a Bernabé; Bernabé le pegó a Burundanga porque Burundanga le pisó los piés».

)Fue profetisa la «Reina del Sabor»? Porque esa situación descrita en la rítmica canción es, ni más ni menos, la que estamos sufriendo con las entidades responsables de brindar un servicio eléctrico eficiente, seguro y económico a la nación.

Parafraseando a «La Guarachera de Cuba», podríamos cantar:

«Las generadoras le deben al gobierno; el gobierno no paga a las Distribuidoras; las Distribuidoras no saben cobrar; el consumidor le roba a los tres; el gobierno es socio de unos y de otros no; a algunas generadoras se les paga aunque no trabajen; a otras generadoras no se les paga aunque trabajen; el sistema entero va a colapsar; el gobierno se cruza de brazos; y a todos nos llevará el mismísimo diablo!»

Que alguien le ponga la música.