Rafael Molina Morillo – Mis buenos días

Rafael Molina Morillo – Mis buenos días

Uno de los canales de noticias por televisión que ofrece sus servicios por cable tiene un magnífico eslogan que reza: «Aquí no sucederá nada sin que usted lo sepa». Yo me permito parafrasearlo para aplicárselo al país, de tal modo que diga: «Aquí no sucederá nada, aunque todo el mundo lo sepa».

¿A qué me estoy refiriendo? Pues al último escándalo destapado en esta querida Patria de las maravillas, que yo apuesto peso a morisqueta que quedará sin sanciones para los villanos responsables del mismo. Me refiero al super fraude del Plan Renove.

A decir verdad, no hay nada nuevo bajo el sol. Ya se había hablado mucho de las irregularidades que se han cometido en perjuicio del Estado y del pobre pueblo dominicano, en la aplicación del llamado Plan Renove, mediante el cual se han importado miles de vehículos dizque para mejorar el transporte terrestre, pero que en realidad solo ha servido para alimentar la más burda corrupción.

Lo único nuevo consiste en que el hecho ya dejó de ser un simple rumor o una afirmación tal vez temeraria, sino que ha quedado oficializado porque se basa en un informe de la Contraloría General de la República sobre lo que ha pasado en el Plan Renove desde enero del 2002 hasta abril del 2003.

Sindicatos inexistentes que se quedaron con vehículos pagados con dinero del pueblo; funcionarios del gobierno beneficiados turbiamente en operaciones que envuelven más de 40 unidades; centenares de otras unidades cuyo paradero se desconoce; compañías inexistentes a las que les fueron «comprados» más de mil vehículos; donaciones sospechosas y no aclaradas; falta de documentación adecuada… y otras lindezas por el estilo, aparecen con pelos y señales en el informa de la Contraloría.

Ahora bien: ¿Esperan ustedes, amigos lectores, que les caerá el peso de la Justicia a los culpables de esta nueva canallada? Pues sigan durmiendo de ese lado… porque, como de costumbre, «aquí no sucederá nada, aunque todo el mundo lo sepa!»

LA FRASE DE HOY: «La censura es la cosa más peligrosa que Dios ha permitido que exista en la Tierra» (Sam Phillips).

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