Con este título recibí un artículo destinado originalmente a ser publicado en la revista «Ahora», de la autoría del investigador literario Franklin Gutiérrez, un dominicano aplatanado en los Estados Unidos desde 1988, profesor de Lengua Española y Literatura Latinoamericana en The City University of New York. El trabajo no vio la luz pública debido al cierre forzoso de dicha publicación.

Revela Gutiérrez en el susodicho artículo, que en Nueva York alrededor del ochenta por ciento de los establecimientos comerciales localizados entre las calles 135 y 207 del sector Washington Heights son de dominicanos, así como que los sudamericanos controlan gran parte del comercio en Queens, los cubanos predominan en New Jersey y Miami y los mexicanos en Nuevo México y California.

Sin dejar de ponderar el progreso de los latinoamericanos en los Estados Unidos, el amigo articulista pasa entonces a referirse al fenómeno del deterioro de nuestra lengua nativa, el español.

Washington Heigths, zona donde se han establecido alrededor de 300,000 dominicanos dice , es el lugar ideal para un latino residente en New York que no sepa inglés. Allí, curiosamente, muchos comerciantes se han visto obligados a colocar en las puertas y en los cristales de sus tiendas la frase «Se habla inglés», para sugerirles a los escasos angloparlantes que transitan dicha área que ellos también son bienvenidos a sus negocios.

Pero )que está ocurriendo con el español de los 40 millones de hispanos residentes en los Estados Unidos?

«Sencillamente afirma Gutiérrez , el idioma español está en agonía, el spanglish lo está matando. El spanglish (fusión arbitraria del inglés y español que no tiene ningún parentesco con el bilingüismo) es un mal que está afectando a todos los hispanos que viven en Norteamérica».

Mañana, amigos lectores, continuaré comentando el trabajo de Franklin Gutiérrez, para que podamos apreciar de cerca cómo se está asesinando al idioma en nuestras propias narices.