El catedrático Rafael Montero tiene en carpeta dirigir la Facultad de Ciencias de la Salud a partir de junio próximo, para transformar el sistema de enseñanza- aprendizaje y adaptarlo a la realidad que demandan los nuevos tiempos, en que la tecnología es la herramienta fundamental.
El profesor, que tiene grado de doctorado y maestría, propone incentivar la investigación con la finalidad de que de la escuela salgan mejores profesionales y la universidad aparezca en los ranking internacionales de donde ha estado ausente.
Considera que la UASD y en la facultad debe desarrollarse la docencia en mejores condiciones, con programas académicos actualizados y teniendo en cuenta la diversidad, multiplicidad y pertinencia de contenidos, de manera que los egresados tengan las competencias que requiere la sociedad.
En su programa de gobierno 2022-2026, que contiene 20 páginas, Montero propone promover el desarrollo de una línea editorial de la Facultad, para que aquellos docentes que tienen material de apoyo informal o no regulados, los transformen en documentos académicos que evolucionen a libros de textos, guías y manuales.
Esto conllevaría a que esas producciones editoriales puedan ser incluidas en los programas de las asignaturas de la UASD y otras instituciones de educación superior nacionales y del extranjero, para acrecentar el valor de las cátedras y la visibilidad de los autores y de la Facultad.
Puede leer: ¡A cuidarse! Casos mundiales de COVID suben tras dos meses a la baja
Para garantizar la calidad en la docencia, Montero proyecta crear mecanismos de estandarización de los programas de las asignaturas, conforme a los requerimientos internacionales, para facilitar el proceso de homologación de los egresados.
Se propone, además, producir un catálogo en línea y físico de la oferta programática de la Facultad de Ciencias de la Salud con alta efectividad y que resulte atractivo para interesados en el ámbito nacional e internacional.
También, promover la mejora de las competencias de los docentes y la ampliación de habilidades en el uso de herramientas virtuales y otras tecnologías, para la preparación de guías docentes a través de entrenamientos especializados.
Otro aspecto para apoyar la docencia de grado y postgrado es, crear las condiciones para que exista acceso abierto a Internet en los entornos de la Facultad.
Sugiere invertir en el fortalecimiento de la plataforma virtual, para que los programas y asignaturas que apliquen, utilicen esa herramienta de manera audaz y eficiente.