MADRID. – El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, fue reelecto ayer como líder del Partido Popular (PP), formación conservadora que gobierna España desde 2011 y vio su imagen dañada por una ristra de escándalos de corrupción. En un congreso celebrado en Madrid, Rajoy, máximo dirigente del PP desde 2004, fue reelegido presidente de la formación con el apoyo de 2,530 compromisarios, de un total de 2,645 votos válidos. El mandatario, de 61 años y jefe de gobierno desde finales de 2011, concurrió como candidato único. El dirigente decidió conservar como número dos a la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, quien mantiene así una acumulación de cargos que había levantado críticas en el partido. Parte de su poder pasará no obstante a manos de Fernando Martínez-Maíllo, nuevo número tres del PP. «Es un honor (…) empecé muy joven, y mi primera actividad en este partido fue pegar carteles», dijo Rajoy nada más conocerse el resultado.
«No queremos ni revoluciones ni sobresaltos», afirmó en un discurso previo, al defender su candidatura y su equipo. En 2015, sin embargo, Rajoy se había visto fragilizado por una serie de malos resultados electorales, en buena parte debidos a los escándalos de corrupción que afectaron a su partido y que no mencionó este sábado. Este mismo viernes, coincidiendo con la apertura del congreso del PP, un tribunal impuso penas de entre tres y trece años de cárcel a once acusados de amañar contratos entre el gobierno de la región de Valencia (este), dirigida entonces por el PP, y la llamada «trama Gürtel». Entre ellos está la ex consejera regional de Turismo, Milagrosa Martínez, condenada a nueve años de prisión, y los empresarios que organizaron la red. A fines de 2015, el PP perdió la mayoría absoluta en el Parlamento, pasando de 186 a 123 diputados, de un total de 350. En mayo de ese año además perdió regiones clave como Valencia y ciudades destacadas, empezando por Madrid.