Cincuenta años después, el cantante español Raphael sigue siendo aquel que a pesar del inexorable paso del tiempo continúa llevando hasta el delirio a sus fans con su imponente y efervescente presencia.

 La celebración de sus 50 años de carrera lo trajeron de vuelta a esta tierra en donde cuenta con una legión de seguidores, que como Gloria Vidal, una señora de mediana edad y “Raphaelista” desde hace cuatro décadas, cantó, aplaudió y rindió tributo a este insigne artista de la música romántica en dos horas y cuarenta minutos de concierto.

Con su estilo desenfadado, no exento de dramatismo cuando así lo requería el momento, Raphael ofreció el sábado en el Palacio de los Deportes un apoteósico concierto en el que interpretó  40 canciones.

El cantante  inició esta segunda actuación a las 9:00 de la noche. Su presencia impulsó a la audiencia a  ponerse de pie y a aplaudirle si cesar durante varios minutos. Él, todo galante, no paraba de saludar y hacer reverencias a sus fans.

“Cantares” fue la primera canción de su largo repertorio, que interpretó  acompañado de un pianista.

“Estos son mis primeros 50 años sobre el escenario. Señoras y señores, estoy feliz de estar de nuevo en República Dominicana celebrando con ustedes este aniversario que es difícil de repetir, pero que yo voy a tratar”, dijo. 

Raphael subió la adrenalina con temas clásicos como “Escándalo”, “Mi gran noche”, “Yo soy aquel”, “A mi manera”, “Estar enamorado”, “Cierro mis ojos”, “Desde aquel día”, “Digan lo que digan” y “Siempre estás diciendo que te vas”. Un  momento emotivo fue el dúo que hizo con la fenecida Rocío Dúrcal (en video, ella) con el tema “Como han pasado los años”. ¿Uno dramático?, cuando rompió el espejo al final de la canción “Frente al espejo”.

También reconoció a América con las canciones “Gracias a la vida” y “Nostalgias”.

Raphael finalizó con la repetición de  “Yo soy aquel” y la promesa de volver siempre al país.