La medida fue aplazada por pedido de la defensa de este, que pidió tiempo para conocer el expediente.
A su salida del tribunal, el imputado aseguró que no disparó e insistió en que se trataba de un montaje.
“Hay un montaje ahí, porque a mi ni siquiera me han hecho la prueba de la parafina”, dijo el detenido.
La defensa del raso aseguró que la vinculación en el caso responde a la necesidad de la Policía de encontrar un culpable. Indicaron que la institución se ha negado a realizar una prueba de parafina para determinar si realmente el agente fue el que disparó.
Alcántara fue muerto el pasado 13, justo un día antes de su graduación de licenciado en matemáticas, cuando intentaron asaltarle para robarle su celular.
Sus familiares exigieron que en el caso se encuentren los demás culpables de quitarle la vida a un joven tan valioso, que se graduaría con honores.
Alcántara salió de su natal San Juan hace cinco años para hacerse profesional, luego de trabajar varios años en un campo, en Babor Abajo, en el área de agricultura, para poder venir a la capital, explicó su familia.
Según su primo, Víctor Alcántara Ramírez, el joven matemático trabajó duro para poder convertirse en un profesional, que lograría con altos honores, sueño que fue frustrado por unos antisociales.
La Policía Nacional fue la que dio a conocer que un raso de sus filas estaba involucrado en la muerte del joven, y que habría actuado con otra persona.
Según el órgano, el arma de reglamento del imputado coincide con el proyectil encontrado en la escena del crimen.