LA HABANA.  AFP.  El presidente Raúl Castro advirtió ayer a los cubanos que sufrirán un «inevitable» impacto en «determinados productos y servicios» debido a la crisis económica internacional, por lo que anunció mayor control y ahorro de recursos, y más trabajo para aumentar la producción.

 «Es inevitable que sufriremos cierto impacto en determinados productos y servicios» destinados a la población, dijo Castro al clausurar una sesión del Parlamento, primera del año y de su Gobierno, tras ser electo presidente en febrero, en lugar de su hermano Fidel, retirado del poder por estar enfermo.

 «Para importar el mismo volumen de alimentos que en el 2007, este año se requerirían 1.100 millones de dólares más», añadió en referencia al alza de los precios de los alimentos, una de las mayores afectaciones de la isla, cuya producción nacional es insuficiente.

 Advirtió que la respuesta a la demanda social de aumentar y darle valor al salario «dependerá de la situación económica del país, inevitablemente vinculada a la crisis existente hoy en el mundo, la cual puede incluso agravarse».

 «Es mi deber expresarlo con franqueza, pues no sería ético crear falsas expectativas. Decir lo contrario sería engañarlos», dijo el gobernante, y añadió que «quisiéramos ir más rápido, pero es necesario actuar con realismo».

 Para alcanzar esa meta salarial, Raúl citó «premisas insoslayables»: «orden, control y rigurosa exigencia que aseguren eficiencia, ahorro y eviten robos o desvíos de recursos».