Raúl Mondesí dice siempre sintió inclinación por la política

Raúl Mondesí dice siempre sintió inclinación por la política

POR JEFFREY NOLASCO
Aunque sus últimas estadías en Grandes Ligas han sido frustrantes, Raúl Mondesí siente que no es tiempo de decir adiós al béisbol. Después de una primera etapa de brillo que incluyó el premio de «Novato del Año», dos «Guantes de Oro» y ser el primer Dodger en hacer un 30-30, Mondesí ha vivido ahora una época de tropiezos.

Todo porque las lesiones lo han atacado duro y eso ha provocado que pierda grandes oportunidades con los Piratas, Anaheim y Atlanta.

Eso combinado a que incursiona en la política ha puesto a mucha gente a pensar que sus días en la pelota han llegado a su final.

«No, no voy a retirar. Creo que todavía puedo aportar a cualquier equipo. El hecho de que esté en política no significa que me vaya del béisbol», dijo Mondesí al espacio «Impacto Deportivo» que produce Franklin Mirabal cada sábado a las 3:00 de la tarde en el canal 11.

«Estoy entrenando, espero fortalecer mis piernas y confío estar en juego con el Escogido en la primera semana de diciembre», agregó.

¿POR QUÉ ENTRA EN LA POLÍTICA?

La pasión por la política no es algo que ha surgido de la noche a la mañana, según relata en antiguo estelar de los Dodgers.

«Una vez el doctor Joaquín Balaguer visitó mi casa en San Cristóbal y desde entonces he sentido aprecio por el partido reformista», dice.

«Yo llevo un tiempo ayudando a mucha gente y no lo hacía con fines políticos. Es por eso que la gente me tiene un gran cariño», agregó.

Expuso que está claro que no aspira a ese cargo por asuntos económicos puesto que tiene dinero suficiente para vivir sin problemas.

«El caso es que si ayudaba con mi dinero, podría hacer más si tuviera más recursos destinados a resolver problema a la gente pobre», aseguró.

Con respecto a un posible discurso bonito dice: «la gente está cansada de eso. Lo que se requiere es de personas que hablen manos y resuelvan más», dijo Mondesí.

Tito Hernández ha sido uno de los mentores del proyecto de Raúl Mondesí.

CREE SERÍA INJUSTO NEGARLE PREMIO A ORTIZ

David Ortiz está impresionando a dirigentes, periodistas, fanáticos y hasta a muchos jugadores que lo definen como una superestrella.

En la lista de sus admiradores está Raúl Mondesí, quien afirma que Minnesota paga el precio de la desesperación por no darle la oportunidad.

«Los Mellizos pudieron tener a David, pero se desesperaron. Ahora miren como se ha convertido en uno de los bateadores más temibles», dijo Mondesí.

Con respecto al debate sobre quién debe ser el Más Valioso, Mondesí tiene una tesis contundente: «David significa más para Boston».

Dijo que pocas veces se ha visto a un jugador tan oportuno y que haya hecho tantas cosas en tan poco tiempo años con los Medias Rojas.

«Debe ser el Más Valioso. Eso de que no juega defensa no tiene sustento porque el ha hecho lo mejor que se le puede pedir a un bateador», expuso Mondesí.

A su juicio, cuando Ortiz sea agente libre deberá ganar 20 millones de dólares por año. Si no lo consigue en Boston, otros se lo darán.

REVELA EL SECRETO DE PEDRO MARTÍNEZ

Al tratar el tema de los lanzadores que más problemas le han dado en Grandes Ligas, citó a Pedro Martínez como el más difícil.

¿El motivo? «Una vez Pedro me lo dijo algo y fue con el tiempo que caí en cuenta. El me explicó que trata de meterse en la cabeza de los bateadores y por eso casi siempre los pone adivinar y a lucir muy mal», dijo.

Es decir, que desarrolló la facultad de descifrar qué pensaba el bateador, qué pitcheo creían que Pedro les haría y eso daba resultado.

LA PRESIÓN LO HIZO SER MEJOR JUGADOR

Una etapa de presión que recuerda Raúl Mondesí fue en su año de novato con los Dodgers en 1994.

Relata que los Dodgers tenían una racha de que cada año tenían un «Novato del Año» y a juicio de Mondesí, eso le puso un poco de presión.

«Me hablaron de eso antes de comenzar la campaña y no quería fallar. Pero Manny Mota me ayudó mucho para cumplir con la meta. Me dijo que tenía que trabajar duro día y noche y así lo hice», recuerda.

Según cuenta, eran tiempos de mucha hermandad y cita a Ramón Martínez y José Offerman, entre otros, como gente que lo ayudó bastante.

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