POR LILIANA CEPEDA
¿A qué persona no le agrada degustar un rico y apetecible plato de pastas?. Resultan ser no solo una delicia que aporta versatilidad en la mesa  de cualquier comensal, si no también una nutritiva ración alimenticia que posee mucho aroma  y sabor.

Dentro  de la amplia diversidad de pastas que existe, los raviolis constituyen una verdadera exquisitez culinaria con la que es posible elaborar platos originales y sabrosos.

 Raviol, cuya etimología proviene del vocablo genovés raviolo, que significa “plegado”, es una variedad de pasta con la que se pueden elaborar deliciosos platos. Su forma es la de un replegado que generalmente se rellena con múltiples mezclas y aderezos.

 El relleno puede variar dependiendo de las diferentes regiones en las que se prepare. Pero los más preferidos en la gastronomía dominicana son los que se preparan a base de tomate y carne molida.

 Los platos de ravioli suelen estar acompañados además, de caldos o salsas de albahaca, la cual recibe el nombre de pesto. Estos son las formas más típicos de preparación de ravioli aunque existen variaciones más modernas.

La preparación de ravioli requiere de una pasta especial que tenga bastante agua y poco huevo. Se elaboran  con una forma más rápido al extender sobre la mesa una lámina cuadrangular de la pasta para añadir el  relleno de su elección.