RD entre países más dados a la  desnutrición

<P>RD entre países más dados a la  desnutrición</P>

Los índices de subnutrición en América Latina tienen tres lugares “favoritos” para incrementarse en el año que comienza: República Dominicana, Haití y Nicaragua, según estimaciones provisionales de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación  (FAO). En las estadísticas de la FAO, el país dominicano figura con 29% de ciudadanos con ingesta insuficiente de nutrientes, con  estancamiento e incluso incremento en el número absoluto de desnutridos.

La República Dominicana, Haití y Nicaragua son las naciones que corren más riesgo de aumentar la cantidad de  personas en situación de hambre y, por tanto, incrementar el índice de subnutridos, que para el  país es de 29%.

“Con respecto a la subnutrición, estimaciones provisionales de la FAO señalan que entre 2005 y 2007, 6 millones de personas podrían haberse sumado a la población en situación de hambre en la región (FAO, 2008), lo que representaría prácticamente el retroceso total del progreso realizado desde 1990. Los países más vulnerables serían Haití, República Dominicana y Nicaragua, donde entre el 80 y 60 de su población estaba en inseguridad alimentaria en el 2007”.

Junto a la advertencia, que aparece en el último “Panorama del Hambre en América Latina y el Caribe”, la FAO establece que aunque la República Dominicana ha avanzado en la reducción del porcentaje de subnutridos, el número absoluto de personas en  condición de subnutrición se ha estancado e incluso incrementado.

En la misma situación se encuentran  Paraguay,  Trinidad y Tobago, Haití, Bolivia y Panamá, que podrían retroceder en  la lucha por alcanzar las metas de la Cumbre Mundial de Alimentos (CMA), que busca reducir el número de personas que padece hambre.

El costo. De acuerdo a las  estimaciones para América Central y República Dominicana (CEPAL-PMA, 2007), la historia de la desnutrición global en las últimas décadas habría generado un costo de casi US$6,700 millones de dólares en el año 2004, derivado de mayores gastos por tratamientos de salud, ineficiencias en los procesos educativos y pérdida de productividad, equivalentes al 6.4% del PIB de los siete países, con un rango entre el 1.7% y  el 11.4%.

El 90% de los costos estimados en ese estudio reflejaría las pérdidas de productividad resultantes del 1.7 millón de personas que, de no haber muerto por causas asociadas a la desnutrición, formarían parte de la población en edad de trabajar. Otra parte de los costos es  la educación, ya que  la desnutrición infantil produce una pérdida promedio de dos años de escolaridad.

Por otra parte, el estudio señala que de reducirse a la mitad la desnutrición infantil en  2015, y cumplir así la meta 2 de los Objetivos del Milenio, se ahorrarían alrededor de US$1,000 millones   y más de US$2,200 millones si se  lograra erradicar.

Tales estimados, dice el informe, confirmarían la hipótesis de que más allá de lo  ético, la erradicación del flagelo genera importantes impactos sociales y significativos ahorros económicos. “Todo programa efectivo en disminuir la incidencia de la desnutrición, generará impactos en la calidad de vida de las personas e importantes ahorros para toda la sociedad”.

Las claves

1. Poco optimismo en ALC

Cifras de la CEPAL (2008b) y el BID (2008) indican que la pobreza extrema podría incrementarse entre 10 y 26 millones de personas como resultado del alza de los precios de los alimentos, alcanzando o incluso superando los 200 millones de pobres en el 2008.

2. ¿A dónde va?

América Latina produce un  30% más de los alimentos que necesita para satisfacer las necesidades energéticas de la población.

3.  Indigentes y pobres

El número de  ambos  al 2008 está por encima de los niveles observados en el año 1980 y ligeramente por debajo de las cifras de 1990. Mientras en 1980 se estimaba que alrededor de 136 millones de personas en ALC era pobre, la cifra para 2008 se situaba en aproximadamente 182 millones, equivalente al 33% de la población de la región.  Los pronósticos establecen que la población en condiciones de pobreza extrema aumentaría en  2 millones de personas.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas