La DGII tiene más de 288 millones de comprobantes fiscales electrónicos emitidos y 915 contribuyentes emisores electrónicos

República Dominicana es el decimoséptimo Estado latinoamericano en implementar la facturación electrónica, marcando un hito importante en su camino hacia la modernización fiscal.

Hasta principios de este mes de marzo la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) tiene más de 288 millones de comprobantes fiscales electrónicos emitidos, 915 contribuyentes emisores electrónicos, 1,874 contribuyentes en proceso de certificación, 39 proveedores de servicios de facturación electrónica autorizados y 334 contribuyentes son facturadores gratuitos.

La discusión sobre la facturación electrónica comenzó en el año 2018, pero no fue sino hasta 2023 cuando se formalizaron los esfuerzos hacia su adopción, con la promulgación de la Ley 32-23 el 16 de mayo.

Esta ley estipula que la facturación electrónica será el único medio de facturación permitido, implementándose gradualmente a partir de 2024, empezando por los grandes contribuyentes nacionales; continuando con los grandes contribuyentes locales y medianos para el 2025, y finalizando con los pequeños, micro y no clasificados para el 2026.

En este contexto, el informe de la plataforma de contabilidad digital Alegra.com, “Evolución Tecnológica: Facturación Electrónica y su Adopción en Latinoamérica”, describe el progreso notable de República Dominicana en la implementación de este sistema.

Al respecto, Haydeé Cabrera, líder estratégica de Alegra.com en República Dominica, menciona que “A pesar de que se ha anunciado que la facturación electrónica para las mipyme será obligatoria en 2026, es crucial que las pyme comiencen a familiarizarse con este sistema cuanto antes. Este conocimiento anticipado facilitará una transición más fluida, permitiéndoles aprovechar al máximo los beneficios que esta ofrece”.

Indicó que la transición hacia la facturación electrónica es un cambio fundamental que implica ajustes tanto en los procesos internos como en la cultura organizacional y la educación y el soporte son clave en este proceso de adaptación.

Agregó que aguarda la publicación del Reglamento de aplicación de la Ley 32-23, que aportará claridad y dirección adicionales, mientras el Gobierno incentiva la adopción temprana mediante beneficios fiscales.