Busca combatir el comercio ilícito de alcoholes y cigarrillos, que genera pérdidas y riesgos salud
El Gobierno moderniza su sistema de control fiscal para combatir el comercio ilícito de bebidas alcohólicas y cigarrillos que, además de producir una merma en los ingresos fiscales, es un serio problema de salud por las muertes que produce el consumo de alcohol adulterado, según el último reporte de Reconnaissance International sobre Estampillas Fiscales y Trazabilidad en el Caribe.
El reporte Tax Stamps & Traceability (su título en inglés) cita que en el 2018 el nivel estimado de evasión fiscal en bebidas alcohólicas y cigarrillos fue 40% y cada punto porcentual equivale a US$10 millones en pérdidas de ingresos fiscales. Destaca que el Gobierno desarrolla un moderno sistema de trazabilidad fiscal que sustituye las herramientas usadas para combatir la evasión fiscal desde los años 60.
El comercio ilícito de alcohol a que se refiere el informe es una amenaza real. La semana pasada el Cuerpo Especializado de Control de Combustible y Comercio de Mercancías (CECCOM) incautó un tanquero con capacidad para 10,000 galones de alcohol ilícito y un minibús con 12 botellones y garrafones que serían comercializados en el mercado local.
La Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD) valoró como positivas las políticas para perseguir el comercio ilícito de productos regulados.
“El comercio ilícito es uno de los factores que más afectan la competitividad en el mercado local pues constituye una de las formas de competencia desleal contra las empresas formalmente establecidas, que cumplen con sus obligaciones tributarias y que se apegan a las leyes y normas de calidad existentes”, dijo en una nota de prensa.
De acuerdo con el último reporte anual de Reconnaissance International sobre Estampillas Fiscales y Trazabilidad en el Caribe, en el país este problema no es “solo económico, sino también materia de salud, con la muerte de docenas de consumidores cada año, como resultado del consumo de productos alcohólicos adulterados”.
Con mucha frecuencia se reportan muertes por consumo de alcohol adulterado o de fabricación clandestina. El año pasado se registraron 330 personas fallecidas por ingerir clerén, una de las bebidas de producción artesanal más populares en el país.
Como parte de los esfuerzos para combatir el problema, detener la evasión fiscal y aumentar la recaudación de impuestos, dice el informe; la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) trabaja el Sistema de Control y Trazabilidad Fiscal (TRAFICO) para identificar, marcar, autenticar y rastrear bebidas alcohólicas y cigarrillos.
El sistema utiliza marcas fiscales aplicadas directamente y sellos de papel con un código único de identidad para fines de rastreo, así como rasgos basados en material (tintas) de seguridad. Las marcas, explica el reporte, cuentan con 10 rasgos de seguridad con elementos forenses, que permiten a las autoridades distinguir un producto legítimo de uno ilícito.
ZOOM
Tiene un portal
El sistema incluye un portal web y app móvil que permite al consumidor escanear cada producto y determinar su legalidad, así como informar anónimamente a las autoridades sobre irregularidades en un producto. Cada escaneo se enriquece con metadata (coordenadas GPS) que facilitan la visualización y el análisis de los datos.