Javier Herrera 
Sobre la explosión en el centro de la provincia San Cristóbal, ocurrida el 14 de agosto, cerca de las 3:00 de la tarde, se sabe que de manera oficial son 34 personas fallecidas, aunque las autoridades sólo han podido identificar y entregar a los familiares 15 cadáveres. Además, por el siniestro, hay 50 heridos, dos en estado delicado.
Menos de una hora después del estadillo, aquel fatídico lunes, el alcalde de esa demarcación, José Montás, había manifestado a algunos periodistas que las razones de la explosión se darían a conocer luego que los equipos de rescate terminaran sus labores. Sin embargo, no sucedió así. El presidente de la República, Luis Abinader, dijo a la prensa que el departamento de Inteligencia del Ministerio de Defensa, el J2, investigaría junto a otras agencias estatales qué causó la tragedia.
Este lunes 28 se cumplirán dos semanas sin que el país, de manera oficial, sepa con exactitud qué explotó. Hasta el momento sólo hay rumores que giran en torno a un supuesto tanque de gas, materiales químicos y otras conjeturas.
El ingeniero y miembro de la Academia de Ciencias de la República Dominicana, Osiris de León, entiende que «las autoridades deben acelerar el proceso de investigación científica de la terrible explosión ocurrida en San Cristóbal, porque en virtud de la magnitud de esa tragedia, la sociedad, muy preocupada por conocer los detalles de las causas, espera un informe científico, avalado en criterios físicos y químicos, en análisis químicos cuantitativos mediante espectrofotometría de absorción atómica y en análisis de partículas mediante difractometría de rayos x, pues, después de tantas y tantas teorías puestas a circular por la ciudadanía, solo un estudio científico de alto nivel sería recibido con total y absoluta confianza por todo el país».
Sobre a posibilidad de que el gobierno dominicano pida ayuda internacional, específicamente al Buró de Investigación Federal (FBI, en inglés), como han sugerido algunos sectores de la ciudadanía, de León considera que si las autoridades locales no tienen a mano las herramientas científicas necesarias para determinar con precisión y objetividad las causas de la gran explosión, o en caso de que entienda que las dudas de la población puedan restar credibilidad a la investigación, entonces podría solicitar el soporte de agentes especializados en explosivos de dicha agencia norteamericana.
«El alto nivel de trituración de gruesos muros de hormigón, de hasta 30 centímetros de espesor, la destrucción de muros, paredes, columnas y vigas de hormigón en un radio de 30 metros, la rotura de cristales en un radio de hasta 500 metros, y las fuertes vibraciones del suelo en un radio de varios kilómetros, es señal clara de una explosión de gran dimensión provocada por un agente explosivo de alto poder energético, tipo gas o tipo agente sólido de alto poder explosivo, y aunque se diga públicamente que allí no había ningún agente explosivo, lo cierto es que allí sí había un alto volumen de un agente explosivo de alto poder, pues de lo contrario no se hubiese producido una explosión con ese alto nivel de destrucción y esa cantidad de muertes, heridos y desaparecidos, que ha traumatizado a la ciudad de San Cristóbal», detalló el experto.
En una nota de prensa de la Procuraduría General de la República (PGR), el director general del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), Francisco Gerdo, dijo que hasta la fecha este órgano que dirige tiene 20 casos que corresponden cada uno a un segmento corporal, no a un cuerpo completo.
Explicó que se está trabajando con las pruebas de ADN para la identificación de los cuerpos y que para ello fueron enviados familiares de 22 desaparecidos al laboratorio Referencia, donde se lleva a cabo el proceso.
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Se recuerda que el 18 de agosto, a cuatro días del siniestro, el Ministerio Público dijo que tiene prueba de que el pasado mes de marzo en la empresa donde se produjo el incendio, en la citada provincia sureña, se registró un fuego ocasionado por el contacto entre chispas y un químico «y los responsables de Vidal Plast no tomaron ninguna medida, a pesar de saber el elevado riesgo de sus operaciones».
“En el Ministerio Público tenemos a varias personas bajo investigación. Desde que se produjo la explosión y se inició el incendio, los equipos de la fiscalía están movilizados con el apoyo de la Dirección General de Persecución del Ministerio Público”, indicó Fadulia Rosa Rubio, fiscal titular de San Cristóbal.
