La cláusula mediante la cual el Club de París obliga a los países deudores que quieren renegociar su deuda con los gobiernos a dar igual tratamiento a la deuda con el sector privado internacional, es obligatoria y el país tendrá que acogerla para poder renegociar su deuda, se informó ayer.

Se informó que las autoridades dominicanas estarían barajando ofertas sobre la deuda con el sector privado internacional que aunque no impliquen una renegociación de la deuda, envíen la señal al Club de París de que el sector privado también asumirá un sacrificio en la solución a los problemas que obligan a la República Dominicana a renegociar su deuda ese organismo acreedor.

No obstante, hay quienes plantean que si la renegociación con el Club de París obligara a renegociar la deuda con el sector privado, sería preferible que esa renegociación se aplazara por el costo que podría tener en término del acceso del país al financiamiento privado internacional.

Quienes plantean esta posición consideran que no valdría la pena, para renegociar unos 300 millones de dólares, que el país pueda ver afectada su imagen crediticia ante el sector privado internacional.

«Si a crisis interna que enfrenta el país se agrega falta de pago a acreedores del sector privado internacional, se podrían ver perjudicados los ingresos de divisas a través del financiamiento en fuentes privadas internacionales», expresó un técnico consultado.

Se explicó que el país no debe por renegociar unos 300 millones de dólares en el Club de París, en una economía en una economía que genera 12,000 millones de dólares al año, ver afectada su imagen crediticia ante la comunidad financiera internacional.

Un reciente informe de Bear Stearns cuestiona que en el presente año la balanza de pagos de la República Dominicana presente un déficit de 300 millones de dólares, como había sido estimado en el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Además, el informe advierte que si la reestructuración de la deuda externa con el Club de París implica una reestructuración de la deuda con los poseedores de bonos soberanos, el costo sería demasiado elevado para cerrar una brecha financiera que podría no existir y que en todo caso sería irrisoria.

El informe estima que en la cuenta de errores y omisiones de la balanza de pagos ha sido sobreestimada, ya que se contempla que ascienda a 1,300 millones en el 2002, mientras que ellos estiman que no supere el nivel del 2002, que fue de 967 millones de dólares, con lo cual se cerraría la brecha financiera de la balanza de pagos estimada en 300 millones de dólares en el acuerdo con el FMI.

Adicionalmente, el informe plantea que ha sido subestimado el superávit de la cuenta corriente de balanza de pagos en 300 millones.

En el caso de los bonos soberanos, un técnico consultado advirtió ayer que peor aún sería que el país dejara de pagar los intereses generados por los mismos.

Se explicó que con relación a los bonos, está el problema de cualquier acreedor podría acudir a los tribunales en los Estados Unidos y embargar las cuentas del Estado dominicano.

El próximo domingo parte una misión del gobierno dominicano para iniciar las negociaciones con el Club del París.

Para el lunes y el martes está programado que la misión trabaje con el Club del París en la conciliación de la deuda dominicana.

Para el tercer día de trabajo hay programa una reunión previa o preparatoria para el inicio de las conversaciones, y al día siguiente se iniciarían formalmente las negociaciones.