El Estado dominicano obtuvo ganancia de causa ante un tribunal de arbitraje internacional, luego de ser sometido en el marco del DR -Cafta por una empresa extranjera que lo demandó por US$100 millones.

El proceso legal fue iniciado por la empresa estadounidense Corona Materials, luego de que el Ministerio de Medio Ambiente le rechazara una solicitud de una licencia ambiental para una concesión minera de agregados y la construcción de un muelle.

El inversionista alegó que la negativa del permiso fue injusta y que el país había denegado justicia, al supuestamente prometerle que reconsideraría el rechazo y le expediría la licencia en cuestión.

El ministro de Medio Ambiente, Bautista Rojas Gómez, explicó que la licencia fue negada porque el área en que se pretendía instalar, en el municipio de Sánchez, Samaná, violaba los límites establecidos por las leyes y afectaba el turismo.

El anuncio fue hecho en rueda de prensa celebrada en el salón Orlando Martínez, del Palacio Nacional, con la participación, además de Rojas Gómez, del ministro de Industria y Comercio, José del Castillo Saviñón, y el equipo de profesionales que encabezó la defensa del Estado.

El país, como parte de su estrategia de defensa, solicitó al tribunal del CIADI realizar un procedimiento expedito, de conformidad con el artículo 10205 del DR-Cafta, lo cual fue aceptado por el tribunal arbitral, constituyendo esto un ahorro en tiempo y recursos económicos para el Estado, efectuándose una sola audiencia en París, Francia.

Del Castillo Saviñón resaltó que el Estado dominicano articuló una defensa adecuada, y de esa manera pudo obtener el laudo del tribunal arbitral, favoreciendo a la República Dominicana en el proceso.