Cuatro millones y medio de dominicanos (56% de la población activa) viven del trabajo informal en la actualidad, y sin seguridad social, en tanto el desempleo se sitúa en un 14 por ciento al entrar el 2018, según cifras de la Confederación Autónoma Sindical Clasista (CASD).
La organización conmemoró ayer el 56 aniversario de su existencia, efeméride que la convierte en el único gran sindicato de trabajo vigente de todas las organizaciones laborales que se formaron en República Dominicana entre los años 60 y 70 para lograr la reinvidicaciones del derecho al trabajo, mejores condiciones de salario, jornadas de trabajo dignas y pensiones con pagos razonables.
La mayoría de los desempleados son jóvenes.
Gabriel Del Río Doné, secretario general de la CASD, guardián de los derechos de los trabajadores y uno de los creadores en 1962 de esta confederación de principios y valores del humanismo cristiano, hizo ayer una perspectiva social del panorama del empleo en el país y afirmó que la batalla continúa para conseguir aumento de salarios y la seguridad social a que aspiran, toda vez que para el 2028 el pago de las pensiones representará el 22 por siento del sueldo.
Al concluir la misa de acción de gracias en la Iglesia Corazón de Jesús, en el sector Villa Juana del Distrito Nacional, decenas de miembros de la CASC se trasladaron a su local de la calle Juan Erazo, donde volvieron a encender la llama del sindicalismo. Compartieron un bizcocho para recordar los pasos que han tenido sus enérgicas acciones durante estos 56 años de demandas, enfrentamientos y diálogos infructuosos con los empleadores, por conseguir incremento de salarios más allá del nivel básico.
Del Río Doñé declaró que el salario mínimo en la República Dominicana debería rondar los RD$22,000, debido al alza de los precios de los alimentos, de la vivienda y del costo de la vida en sentido general.
Lucha documentada. La CASC firmó los primeros pactos colectivos del país en el área azucarera con el Consejo Estatal del Azúcar (CEA) en Boca Chica. Los acuerdos continuaron y se mantienen. Señala que las principales demandas laborales fueron por el derecho de la tierra.
El primer gremio laboral formado por la CASC fue la Federación Dominicana de de Ligas Agrarias y Cristianas (FEDELAC). Miles de campesinos recibieron un pedazo de tierra por modificaciones a la Ley de la Reforma Agraria. En la zona urbana, la segunda entidad fue la Federación Nacional de Trabajadores de Obras Públicas (FENATOP), con 44 sindicatos de la entonces Secretaría de Obras Públicas y Comunicaciones.