República Dominicana tiene capacidad de producir en dos años toda la semilla que importa para cultivar papa. El encargado de Biotecnología Vegetal del Instituto de Innovación en Biotecnología e Industrial (IIBI), Julio Mejía, expuso que el Centro de Biotecnología Vegetal (Cebive) tiene capacidad total de producir 3.5 millones de plantas al año, pero actualmente se produce menos, pues trabajan según los pedidos.

Destacó que todas las plántulas que producen permiten que el cultivo aumente en rendimiento, peso y en calidad.

Especificó que en el caso de la papa, las plagas y las enfermedades han disminuido la calidad de la semilla y por eso se ha estado importando. Pero el quintal de semilla es el 45% de la inversión de la tierra, un costo muy alto.

Sin embargó, la semilla de papa del laboratorio resiste las condiciones del suelo y del clima a niveles superiores que la que es importada.

Pero indicó que se necesita más empuje para que los productores entiendan que la mejor manera de producir la papa es utilizando las plántulas del Cebive y no estar importándola pues al traerla también traen plagas y enfermedades. Exhortó a que esto forme parte de políticas públicas dirigidas para impulsar la utilización de estas semillas producidas in vitro.

Dijo que en el laboratorio con la tecnología y la infraestructura en dos años se puede dejar de importar semillas.

Indicó que la papa es un cultivo de siglo corto y en solo 72 días se pueden tener semillas de calidad.

Musáceas han sido afectadas. Mejía explicó que en sentido general el cultivo de musáceas ha sido afectado por enfermedades y es por esto que en el caso de la yautía más del 70 por ciento está usando plantas in vitro.

Destacó que en la zona Nordeste (Nagua, Sánchez y Samaná) se sembraba mucha yautía coco, pero un hongo afectó su producción y desde hace más de seis años trabajan con esta planta, logrando plántulas resistentes a este hongo, más calidad, y hasta se está exportando.

Dijo que este cultivo se ha llevado a otras provincias como Azua y Pedernales, donde el riego no es por inundación sino por gravedad.

Mejía expuso que estrategia similar ha aplicado con la yautía blanca y amarilla y venden las plantas entre 8 y 10 pesos, mientras en otros viveros cuesta hasta 25 pesos.