GUADALAJARA, MEXICO.   En el tercer partido de la jornada en las competencias panamericanas de Balonmano, se midieron Uruguay y República Dominicana, logrando ambas selecciones un salomónico empate a 24 goles, tras 60 minutos de intensa batalla.

El conteo se abrió con la buena actuación de la dominicana Johanna Pimentel, quien realizó un potente lanzamiento exterior por encima de la zaga uruguaya. En defensa, ambos equipos se pararon con una formación 6-0, pero en el ataque, mientras que República Dominicana fue al uno contra uno, Uruguay hizo circular más el balón, aprovechando los contragolpes y los pocos espacios que las criollas dejaron en la retaguardia.

En la primera parte el partido se jugó gol a gol, sin que faltara el roce. De hecho ambos representativos recibieron amonestaciones de dos minutos y tarjeta amarilla, en clara muestra de la intensidad con la que se jugó el encuentro. República Dominicana se mostró fuerte en el plano defensivo, ya que el físico y la altura de sus jugadoras sobresalía notablemente en el campo de juego; las uruguayas, por su parte, para contrarrestar esa diferencia física se defendieron con técnica y habilidad, factores que las llevaron a finalizar con ventaja de 14-10 los primeros 30 minutos del cotejo.

Para la segunda mitad, Uruguay mantuvo su defensa, y robó en varias ocasiones el balón para salir al contragolpe. En el ataque las charrúas probaron con eficaces cruces.