Rebeldes postergan ataque a Puerto Príncipe

Rebeldes postergan ataque a Puerto Príncipe

PUERTO PRINCIPE.- El líder rebelde Guy Philippe dijo ayer que sus fuerzas retrasarán temporalmente el ataque a la capital haitiana para ver si el presidente Jean-Bertrand Aristide cede a la presión y renuncia. Philippe dijo a The Associated Press desde Cabo Haitiano, la segunda ciudad del país que está en manos de su grupo, que quiere «darle una opción a la paz».

En la capital los nervios comenzaron a aflorar y se produjeron una serie de saqueos. Miles de extranjeros, alertados por sus respectivos gobiernos sobre el nivel de riesgo en Haití, trataban de huir.

Aristide advirtió el martes que si los rebeldes intentan tomar la capital, podrían morir miles de personas. Hasta el momento, el balance de muertos es de unas 80 personas, de las cuáles al menos 40 son agentes policiales.

[b]Capturar Aristide[/b]

Los rebeldes armados quieren capturar al presidente Aristide para juzgarlo por «crimen de alta traición», dijo el miércoles a la AFP su jefe militar, Guy Philippe.

«Queremos capturar al presidente para juzgarlo por alta traición, asesinato, robos, etcétera», agregó.

Phillipe dijo que sus fuerzas están listas para tomar la capital.

«Ya estamos prontos. La ciudad está prácticamente rodeada y de momento procedemos a la identificación de las fuerzas que le quedan a Jean Betrand Aristide», dijo.

El líder insurgente dijo que anhela entrar en Puerto Príncipe el domingo, día en que cumplirá 36 años.

«Por nada del mundo me perdería estar en Puerto Príncipe ese día», agregó.

[b]Barricadas en la capital[/b]

La capital haitiana se convirtió ayer en un hervidero de civiles armados y sus calles se plagaron de barricadas ante la posibilidad de que los rebeldes que intentan derrocar a Aristide ataquen la ciudad.

El ambiente en las calles es de gran incertidumbre, 24 horas después de que el acosado Aristide hiciera un apasionado llamamiento a la comunidad internacional y a sus partidarios para defender su gobierno.

Los barrios periféricos han amanecido con barricadas que son difíciles de atravesar y que están controladas por civiles armados, partidarios de Aristide, que muestran signos de clara tensión.

El centro de la ciudad, por donde es más fácil transitar, es atravesado de forma constante por camionetas cargadas hasta los topes de civiles dotados con armas de gran calibre.

Habitantes de varios barrios de la ciudad han informado que por la noche se han escuchado tiroteos y al menos una radio haitiana ha señalado que Guy Philippe, el ex militar y líder rebelde que en las tres últimas semanas se ha hecho con el control efectivo del centro y norte del país, podría llegar hoy a la capital.

El presidente haitiano -cuya dimisión exigió ayer de nuevo la oposición como única salida a la crisis- aseguró ayer que si la comunidad internacional no intervenía y Philippe intentaba penetrar en la ciudad, «miles de personas» podrían perder la vida en la lucha que se desencadenará.

Aristide también solicitó a la población civil de que proteja a las fuerzas policiales, leales a su gobierno y que en tres semanas de lucha se han visto reducidas de los 5.000 efectivos iniciales a 4.000.

Esa sería la función de los «chimers», los partidarios más aguerridos de Aristide, que patrullan por Puerto Príncipe y controlan las barricadas distribuidas por la periferia y cuya agresividad ha provocado que los responsables de seguridad del plan de evacuación desistan de proceder ayer.

Varios periodistas extranjeros han sufrido ataques en las últimas horas por parte de partidarios de Aristide que controlan las barricadas en la periferia de la ciudad.

Uno de los incidentes más graves se produjo cuando dos periodistas de una radio canadiense fueron amenazados con pistolas en las cercanías de la comisaría de Place Cazeau, en las inmediaciones del aeropuerto de Puerto Príncipe.

Los asaltantes, vestidos de civil y ante la mirada impasible de la policía, colocaron sus pistolas en las sienes de los dos periodistas y posteriormente dispararon por encima de sus cabezas tras destruir sus equipos de grabación, según relataron a otros colegas.

La situación en Puerto Príncipe ha obligado a los responsables de la evacuación de la colonia española, compuesta por unas 60 personas, a aplazarla hasta mañana, jueves, si se dan las condiciones.

Rosa Parés, consultora de un programa de desarrollo casada con un haitiano y única española que llegó ayer hasta las instalaciones del Programa de la ONU para el Desarrollo (PNUD), desde donde debía partir el convoy internacional hacia el aeropuerto, declaró a la prensa que la situación «estaba fatal».

Erica Rerat, una boliviana de 36 años que también tenía previsto haber sido evacuada ayer junto con su marido francés, que trabaja para la ONU, y sus dos hijos de 6 y 9 años, se mostraba más molesta que Parés con la cancelación del convoy hasta el aeropuerto.

«Han esperado hasta el último momento para evacuarnos», declaraba a EFE claramente contrariada.

«Pedimos dejar el país la semana pasada. El avión tenía que haber llegado el viernes cuando estábamos listos para salir pero no se nos ha comunicado hasta hoy que podíamos salir», agregó.

A pesar de que informaciones iniciales indicaban esta mañana que todos los vuelos internacionales con destino al aeropuerto internacional «Toussaint-Louverture» de Puerto Príncipe habían sido cancelados, la compañía estadounidense American Airlines ha seguido operando hoy.

Sólo la francesa Air France ha indicado que cancela de momento sus vuelos.

Además del avión fletado por el gobierno de España para evacuar a sus ciudadanos y los de la Unión Europea, otros tres aviones «charter» que tenían que partir de Puerto Príncipe con personal de la ONU y de otras nacionalidades han sido cancelados.

[b]Cae isla de La Tortuga[/b]

PUERTO PRINCIPE (AFP).- Los rebeldes alzados contra el presidente haitiano Jean Bertrand Aristide tomaron el miércoles la norteña isla de La Tortuga, habitada por 50.000 personas y punto estratégico para el comercio con Florida (Estados Unidos) y Bahamas, dijeron a la AFP fuentes policiales.

Este ataque no dejó víctimas, según las fuentes.

La comisaría de la isla fue atacada por un comando de hombres armados, que saquearon el lugar antes de incendiarlo. El comisario Jean Alexis y dos policías pudieron salir antes y se refugiaron en casas de habitantes de la isla, agregaron.

Situada en las costa norteoste de Haití, la isla de la Tortuga era el último territorio del norte haitiano fuera del control de los rebeldes.

Esta isla dispone de conexiones regulares por barco con Florida y el archipiélago de las Bahamas.

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