Hoy 
POR DIEGO PESQUEIRA
El vicepresidente ejecutivo de la Comisión Nacional de Ejecución de la Reforma Procesal Penal (CONAEJ), rechazó ayer que el Código Procesal Penal tenga un hoyo que permite a los delincuentes obtener su libertad, como afirmaron por separado el juez Rafael Luciano Pichardo y el jefe policial, mayor general Bernardo Santana Páez.
«No estamos de acuerdo con esas afirmaciones y en tal razón la rechazamos», precisó Alejandro Moscoso Segarra. A su juicio no se puede establecer un vínculo entre la nueva normativa y la criminalidad.
Dijo, además, que no existen evidencias precisas que demuestren que las personas puestas en libertad con medidas de coerción sean los responsables de los hechos violentos, robos y atracos, que se registran en el país.
Alegó, empero, que contrario a la percepción de la población en la actualidad existe un mayor número de presos preventivos en las cárceles del país con promedio de 14 mil, lo que a su juicio evidencia que los jueces están imponiendo prisión en muchos de los casos que conocen.
«Nosotros si tenemos datos estadísticos de que ha aumentado la prisión preventiva, es decir, en este momento hay más de 14 mil reclusos en la prisión, y si lo comparamos con años anteriores que era de 12 mil, entonces, el promedio ha aumentado», manifestó.
Dijo, también, que en los próximos días presentará una propuesta al procurador general Radhamés Jiménez Peña, que permita implementar un mecanismo para dar seguimiento a las personas liberadas con medidas de coerción. Adelantó que podría ser un brazalete electrónico que se instale a los justiciables.
Luciano Pichardo, primer sustituto del presidente de la Suprema Corte de Justicia, afirmó que el nuevo Código Procesal Penal tiene un «hoyo» que facilita a los delincuentes salir de prisión a delinquir.
«El Código Procesal Penal tiene un hoyo que facilita a los delincuentes volver a la calle a delinquir tras ser sometido a la justicia», precisó Luciano Pichardo.
El alto funcionario judicial manifestó que no es responsabilidad de los jueces que los delincuentes obtengan con tanta facilidad su libertad, sino que obedece a la aplicación del código. Es por esta situación, dijo, que ha sugerido la revisión del Código, aplicado en el país desde hace poco más de dos años.
Dijo, además, coincidir con el jefe policial, mayor general Bernardo Santana Páez, quien se ha quejado de las facilidades que ofrece el Código Procesal Penal para que los delincuentes queden libre.
